El omeprazol es uno de los medicamentos más recetados en España y en todo el mundo, pero su uso se ha extendido más allá de lo que realmente está indicado. Muchas personas lo consumen como si fuera un “protector de estómago” frente a comidas copiosas, alcohol o la toma puntual de ciertos fármacos. Sin embargo, especialistas advierten que este hábito puede generar efectos secundarios cuando se mantiene durante años sin supervisión médica.
La médico de familia Ana Pérez Ballesta explicó en un vídeo que el omeprazol y otros fármacos similares como el esomeprazol, pantoprazol, lansoprazol o rabeprazol pertenecen al grupo de los inhibidores de la bomba de protones. “Reducen la acidez del estómago y son útiles, pero no siempre. Están indicados en reflujo o esofagitis, úlcera gástrica o duodenal, erradicación del Helicobacter pylori y tratamientos crónicos con antiinflamatorios si hay alto riesgo de sangrado digestivo”, señaló.
El problema surge cuando se toma de manera preventiva sin una causa clínica clara. Según Pérez Ballesta,“para evitar acidez antes de una comida copiosa o cada vez que te mandan un antibiótico o un antiinflamatorio de forma puntual” no debería ser motivo para consumirlo. En sus palabras, esta práctica está muy extendida, pese a que no existe realmente el concepto de “protector de estómago”.
El uso prolongado sin necesidad puede tener consecuencias importantes. “Si lo tomas durante años sin necesitarlo puede dificultar la absorción de calcio, magnesio, hierro y vitamina B12, aumentando el riesgo de osteoporosis, anemia por distintas causas e infecciones digestivas”, advirtió la especialista. Además, recordó que también se ha relacionado con el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado, conocido como SIBO.
Pérez Ballesta subrayó que en consulta ha atendido a numerosos pacientes que llevaban más de una década consumiendo omeprazol sin una justificación clara: “En consulta he visto muchísimas personas que llevan tomándolo diez o 15 años sin saber realmente por qué, algunas de ellas ya con osteoporosis, anemias que no responden a algunos tratamientos o problemas digestivos de los que no encontramos otra causa”.
De este modo, los expertos recuerdan que el omeprazol es un fármaco útil y eficaz cuando está correctamente indicado, pero no debe emplearse de forma rutinaria ni preventiva sin la recomendación de un médico. La automedicación prolongada con este tipo de inhibidores puede provocar complicaciones que superen con creces los supuestos beneficios de tomarlo “por si acaso”.
El omeprazol es uno de los medicamentos más recetados en España y en todo el mundo, pero su uso se ha extendido más allá de lo que realmente está indicado. Muchas personas lo consumen como si fuera un “protector de estómago” frente a comidas copiosas, alcohol o la toma puntual de ciertos fármacos. Sin embargo, especialistas advierten que este hábito puede generar efectos secundarios cuando se mantiene durante años sin supervisión médica.