Marta Diez, enfermera: "¿Sabías que no puedes llevar estas cosas en los quirófanos?"

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Lo que para muchos puede parecer un simple trámite previo a una operación, para el personal sanitario, es una cuestión vital de seguridad.

Marta Díez, enfermera y divulgadora en redes sociales, ha publicado un vídeo en el que explica qué objetos no se deben llevar bajo ningún concepto al quirófano. Su explicación, clara y directa, se ha viralizado por la forma en que desmonta mitos y advierte sobre riesgos que muchas veces pasan desapercibidos.

Nada de joyas, ni piercings ni pendientes

Según detalla Marta, “los pendientes, piercings o cualquier tipo de joyería no se pueden llevar en quirófano”. La razón principal es que pueden engancharse accidentalmente durante la intervención o, peor aún, ser una fuente de infección. Pero eso no es todo: la mayoría de las operaciones utilizan bisturí eléctrico, y “donde tengamos objetos metálicos se podrían llegar a causar quemaduras”. Es decir, no se trata solo de higiene, sino también de prevenir lesiones.

Dentaduras postizas, solo si son fijas

Otra advertencia que lanza la enfermera tiene que ver con la boca. “Las dentaduras postizas, tanto totales como parciales, hay que quitarlas”, explica. El motivo es que pueden desplazarse y complicar una intubación. No ocurre lo mismo con los implantes dentales o las ortodoncias fijas, como los brackets, que sí están permitidos. Sin embargo, aparatos como el Invisalign, que no están fijados, también deben ser retirados.

Ropa interior y calcetines, fuera

Aunque pueda parecer extraño, tampoco está permitido entrar al quirófano con ropa interior o calcetines. Marta recuerda que “un quirófano es un ambiente estéril, y meter ropa del exterior puede aumentar el riesgo de infección”. Además, en caso de urgencia, el personal médico necesita acceder al cuerpo del paciente de forma inmediata, algo que la ropa entorpece.

¿Regla durante la cirugía? Hay solución

Uno de los aspectos menos conocidos, y que Marta menciona con total naturalidad, es la menstruación. “Nunca deberíais llevar tampones o copa menstrual al quirófano”, advierte. Si la recuperación se prolonga y nadie sabe que se llevan, puede haber riesgo de shock séptico. La solución, no obstante, es sencilla: “Si tenéis la regla, lo único que tenéis que hacer es comentarlo, y ya os pondrán o unos empapadores o una compresa que tengan allí”.

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Gracias a vídeos como este, miles de personas descubren detalles fundamentales sobre el paso por un quirófano. Un gesto tan cotidiano como llevar pendientes o calcetines puede tener consecuencias inesperadas cuando se trata de una intervención médica. La divulgación sanitaria, directa y sin adornos, vuelve a demostrar su importancia en manos de profesionales como Marta Díez.