Meredith Broderick, neuróloga: "Dormir de lado favorece el drenaje de los residuos del cerebro durante el sueño"

Dormir de lado no solo puede ser más cómodo, también podría ayudar a limpiar el cerebro. Así lo explicó la neuróloga Meredith Broderick durante su intervención en el pódcast Tosh Show, donde desveló algunas claves sobre el sueño saludable, sus fases y la mejor postura para descansar y cuidar el sistema nervioso.

Broderick, que ha participado en investigaciones científicas sobre el descanso, mencionó un reciente estudio publicado en enero en la prestigiosa revista Cell, donde se analizó cómo la postura al dormir afecta al sistema de limpieza cerebral. “Estos científicos piensan que cuando dormimos de lado, podemos drenar nuestras venas del cuello. Tenemos unas grandes venas yugulares y esta limpieza de residuos que ocurre durante el sueño se produce mejor al dormir de lado”, explicó.

Según sus palabras, esta posición favorece la circulación y la eliminación de sustancias de desecho acumuladas durante el día, un proceso clave para la salud neurológica. Aunque aún se necesita más investigación, los indicios apuntan a que dormir de lado puede ayudar al sistema glinfático, responsable de esta función.

¿Cuántas horas deberíamos dormir?

Durante la charla, Broderick también abordó una de las grandes preguntas del descanso: ¿cuántas horas necesita dormir un adulto sano? “Al menos siete. Entre siete y nueve es lo ideal”, respondió, aludiendo a lo que denomina la “zona Goldilocks” del sueño, ni demasiado poco ni en exceso.

Aun así, reconoció que no todas las personas duermen del tirón. De hecho, levantarse una o dos veces por la noche (por ejemplo, para ir al baño) no tiene por qué ser un problema. “Nos despertamos después de cada ciclo de sueño. Es probablemente lo que está ocurriendo”, explicó, comparándolo con un mecanismo natural de protección que nuestros ancestros usaban en la naturaleza: abrir los ojos unos segundos para asegurarse de que todo sigue bien antes de volver a dormirse.

La temperatura perfecta

Otro aspecto importante para lograr un buen descanso es la temperatura del dormitorio. Según la neuróloga, lo óptimo está entre los 18 y 20 grados. “Ese es mi paraíso”, admitió el propio presentador del pódcast, ante la sorpresa de los oyentes.

Las declaraciones de Broderick no solo arrojan luz sobre cómo debemos dormir, sino también por qué. En los últimos años, la ciencia ha demostrado que el sueño no es solo descanso: es reparación, limpieza y equilibrio. Y detalles como la postura, el número de horas o la temperatura pueden marcar una gran diferencia.