¿Sigues sin pareja? Los hábitos que te están alejando de la posibilidad de encontrar el amor

Tener mala suerte en el amor puede parecer culpa del destino, de las aplicaciones de citas o de los perfiles poco sinceros que uno se encuentra. Sin embargo, un enfoque más introspectivo podría ser la clave para cambiar tu suerte. Así lo plantea un reciente artículo publicado en Your Tango, el cual señala cómo ciertas conductas comunes, aparentemente inofensivas, pueden estar saboteando nuestras posibilidades de encontrar una pareja estable.

Responder tarde a los mensajes o mostrar poco entusiasmo desde el principio puede perjudicar más de lo que imaginamos. Un estudio de 2020 demostró que ignorar o aplazar respuestas genera ansiedad e inseguridad en la otra persona. Además, si conversar con alguien ya te resulta pesado desde el primer momento, quizá ni siquiera estés realmente interesado en conocerle. Alargar los tiempos de respuesta o mostrarse distante suele interpretarse como una señal clara de desinterés o falta de compromiso.

Aunque muchas personas han recurrido a la táctica de hacerse las difíciles, los expertos recuerdan que en realidad tendemos a sentirnos atraídos por quien muestra aprecio hacia nosotros. Si alguien te gusta, es importante demostrarlo. Mostrar entusiasmo por volver a quedar o expresar que lo has pasado bien en una cita puede marcar una diferencia notable. Las conexiones afectivas necesitan cierta calidez para desarrollarse.

Supera primero a tu ex

Salir de una relación anterior y volver al mundo de las citas no siempre es sencillo. Es importante evaluar si uno está emocionalmente preparado antes de comenzar una nueva historia. Tal como advierte un estudio citado por HuffPost, si durante una cita sigues revisando las redes sociales de tu ex, probablemente no tengas el espacio emocional necesario para una nueva relación. Superar las heridas previas y tener expectativas realistas resulta clave para avanzar.

Si te repites ideas negativas como “no soy suficiente” o “no soy atractivo”, esa energía se traslada a tu comportamiento

A veces, sin darnos cuenta, centramos la atención en buscar defectos en la otra persona. Este hábito, más común de lo que parece, funciona como un mecanismo de defensa que impide crear un vínculo real. Si estás más enfocado en descubrir qué tiene de malo tu cita que en conocer lo que puede aportar, acabarás descartando por sistema. Preguntar con segundas intenciones o poner a prueba al otro solo crea una barrera innecesaria.

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También influye la forma en la que nos hablamos a nosotros mismos antes de una cita. Si te repites ideas negativas como “no soy suficiente” o “no soy atractivo”, esa energía se traslada a tu comportamiento. Los expertos recuerdan la importancia de cultivar la confianza personal antes de abrirse a una nueva conexión. Tener presentes tus cualidades positivas puede ayudarte a sentirte más seguro y transmitirlo.

Huye de los pensamientos negativos

Los pensamientos derrotistas también influyen en el resultado. Si vas a una cita convencido de que no te gustará la otra persona o de que vas a salir herido, lo más probable es que no permitas que la experiencia fluya con naturalidad. Este tipo de ideas anticipadas suelen actuar como profecías autocumplidas, bloqueando cualquier posibilidad real de conexión.

Si se desea compartir la vida con otra persona, hay que darle a esa búsqueda la atención que merece

El ritmo de vida es otro factor a tener en cuenta. Si no tienes tiempo ni para concertar una cita entre semana, es difícil que surja algo serio. Las agendas saturadas, los compromisos familiares o el estrés laboral pueden hacer que las citas acaben siendo lo último de la lista. Y aunque eso no significa que tengas que forzarte, sí conviene reconocer que encontrar pareja requiere cierta disposición real para compartir tiempo con alguien.

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Finalmente, muchas personas expresan su frustración porque no encuentran a la persona adecuada, pero no hacen del amor una prioridad en sus vidas. Quejarse del estado de las relaciones sin dedicar tiempo a conocer a alguien, responder mensajes o hacer planes concretos es como querer resultados sin esfuerzo. Si se desea compartir la vida con otra persona, hay que darle a esa búsqueda la atención que merece. No se trata de convertirlo en una obligación, pero sí de entender que abrirse al amor requiere voluntad, disponibilidad y cierta entrega.