Cómo ayuda el vinagre de manzana a proteger e hidratar el cabello de forma natural

• Álex Yáñez, experto en nutrición, desvela el mineral que debemos consumir para mejorar nuestra tensión arterial: "Disminuye hasta un 39% el riesgo de infarto"
• El trucazo que te ayudará a decir adiós al polvo en tus muebles: solo tardarás 2 segundos en prepararlo

Aunque no es un sustituto de productos específicos como champús o mascarillas, el vinagre de manzana puede desempeñar un papel útil en el cuidado del cabello. Sus propiedades antibacterianas y su acidez natural le permiten limpiar el cuero cabelludo en profundidad, eliminando residuos acumulados. Además, puede contribuir a mantener la hidratación del pelo y mejorar su aspecto general. Sin embargo, su aplicación debe hacerse con cautela y siguiendo ciertas pautas para evitar daños. La clave está en la moderación y en un uso bien medido.

El vinagre de manzana actúa como agente equilibrante del pH, lo que ayuda a cerrar las cutículas capilares, favoreciendo así un cabello más brillante y suave al tacto. También es conocido por sus beneficios para combatir la caspa y otras molestias derivadas de un cuero cabelludo desequilibrado. Gracias a su capacidad para estimular la circulación, puede reactivar los folículos pilosos y potenciar el crecimiento capilar. Eso sí, conviene recordar que no debe aplicarse a diario ni sin diluir.

TE PUEDE INTERESAR

4 árboles que crecen rápido en maceta y dan sombra incluso en terrazas pequeñas

El Confidencial

Usar este producto en exceso puede resultar contraproducente, ya que podría debilitar la protección natural del cabello y dejarlo más expuesto a la rotura o a la sequedad. En cabellos teñidos, puede ser útil para mantener el color, siempre que se respete la frecuencia recomendada: una vez por semana como máximo. También es posible utilizarlo como mascarilla con limón para regular el sebo o con aloe vera si el pelo está dañado. En todos los casos, es esencial realizar un enjuague completo tras su uso.

Para aprovechar sus propiedades, basta con mezclar agua y vinagre a partes iguales y aplicarlo tras el lavado, directamente sobre el cuero cabelludo. Se recomienda masajear con suavidad y dejar actuar durante unos diez minutos antes de aclarar con agua fría. Para evitar efectos adversos, no debe aplicarse calor después. Según la guía publicada por Druni, este tipo de tratamiento natural puede complementar tu rutina capilar, pero siempre desde una aplicación ocasional y responsable.