El sencillo método japonés para guardar correctamente los abrigos largos sin utilizar perchas: se ha vuelto viral

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Mantener el orden en el armario puede convertirse en un auténtico reto, especialmente cuando se trata de prendas voluminosas como los abrigos largos. Estas piezas esenciales para los meses de frío suelen arrastrar por el suelo del armario, acumulando suciedad y deformándose con el tiempo. La célebre Marie Kondo, creadora del método KonMari, ofrece soluciones prácticas para maximizar el espacio y conservar la ropa en perfecto estado.

El problema de los abrigos largos radica en la falta de espacio vertical en los armarios. Cuando se cuelgan, no solo arrastran, sino que también tienden a ocupar un área considerable, dificultando la organización de otras prendas. La clave para evitar estos problemas está en reorganizar los armarios, apostando por métodos innovadores que permitan optimizar el espacio disponible.

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Algunos consejos tradicionales, como ajustar la barra del armario o usar fundas protectoras, pueden ser útiles, pero a veces no solucionan el problema del todo. Aquí es donde entra el ingenioso método japonés, una forma revolucionaria de doblar y almacenar los abrigos largos que no solo ahorra espacio, sino que también protege la prenda de posibles daños.

Adiós a los abrigos colgados en perchas

El método japonés, inspirado en las técnicas de Marie Kondo, plantea una forma eficiente y compacta de guardar abrigos largos sin necesidad de perchas. Siguiendo estos pasos, podrás mantener tu armario ordenado y ganar espacio sin sacrificar la calidad de tus prendas.

El truco de Lucía Lipperheide, conocida en redes sociales como @homes.styles, está revolucionando la forma de organizar armarios. Su método, inspirado en técnicas japonesas, ha acumulado miles de visualizaciones y comentarios por su ingenio y practicidad. Promete acabar con el problema de los abrigos largos que ocupan demasiado espacio o se deforman en las perchas tradicionales. A continuación, te explicamos paso a paso cómo ponerlo en práctica y transformar tu armario en un espacio más funcional.

1. Coloca la prenda sobre una superficie plana: extiende el abrigo con la parte de la espalda hacia arriba. Asegúrate de alisar cualquier arruga para evitar que estas se marquen mientras está almacenado.
2. Dobla las mangas hacia dentro: llévalas hacia la espalda del abrigo, alineándolas con los laterales para reducir el ancho de la prenda. Esto ayudará a compactarla sin causar deformaciones.
3. Realiza el pliegue final: dobla la parte inferior del abrigo hacia el centro, luego lleva la parte superior hacia abajo hasta que ambas coincidan. Este método crea un bloque compacto que puedes almacenar en cajas o estanterías, ahorrando espacio considerable.

Con este sistema, puedes almacenar varios abrigos largos en una misma caja, protegiéndolos del polvo y manteniendo su forma original. Además, si tienes prendas más delicadas, puedes optar por guardarlas en fundas antes de aplicar este método para una protección extra. Organizar tu armario nunca fue tan fácil ni tan práctico.