Lo que muchos olvidan plantar en abril: la guía del huerto que sí funciona

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Abril ofrece un momento clave para quienes cuidan su huerto, aunque no todos aprovechan bien este mes. Las condiciones climáticas permiten avanzar con las siembras, siempre que el terreno esté listo. Es fundamental remover la tierra, limpiar las hierbas y aportar nutrientes. Así se garantiza un entorno favorable para el desarrollo de los cultivos.

Algunas hortalizas pueden sembrarse ya directamente al aire libre, como los rábanos, las acelgas, las habas o las espinacas. Otras, como los pimientos o calabacines, necesitan aún protección y deben iniciarse en semillero. La lechuga, en cambio, conviene plantarla de forma escalonada. Esto asegura una cosecha más prolongada durante la temporada.

Suele pasarse por alto la siembra de hierbas aromáticas, que en abril pueden incorporarse sin problema al huerto. El cilantro, el perejil o la albahaca, además de dar sabor, ayudan a mantener alejadas ciertas plagas. También es buen mes para las flores comestibles. La capuchina o la caléndula aportan color y atraen polinizadores.

Junto a la siembra, hay tareas que no deben descuidarse si se quiere un huerto sano. Vigilar el riego, aplicar acolchado y estar atentos a caracoles o pulgones es clave en esta época. Además, conviene planificar bien los espacios para no repetir cultivos. Rotar las especies ayuda a cuidar la fertilidad del suelo y evitar enfermedades.