Cómo ayuda el jengibre a aliviar los problemas digestivos

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El jengibre es una de las raíces más utilizadas en la medicina tradicional gracias a sus numerosas propiedades. Su consumo en forma de infusión se ha popularizado como un remedio natural para tratar molestias digestivas como la hinchazón, los gases y la pesadez estomacal. Esto se debe a su capacidad para estimular la producción de enzimas digestivas, favoreciendo el tránsito intestinal y reduciendo el malestar tras las comidas.

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Sus efectos beneficiosos se deben a compuestos bioactivos como los gingeroles y los shogaoles, con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Algunos estudios sugieren que el jengibre puede disminuir la presión en el esfínter esofágico inferior, lo que facilita la digestión y previene la indigestión. Además, su acción carminativa contribuye a reducir la acumulación de gases, disminuyendo la sensación de hinchazón abdominal.

Para aprovechar sus beneficios, se recomienda preparar una infusión de jengibre con la raíz fresca o seca. Hervir rodajas en agua durante 10 minutos es una de las formas más efectivas de extraer sus compuestos activos. También puede añadirse miel, limón o tomillo para mejorar su sabor. Existen versiones comerciales en bolsitas de té, aunque su concentración de principios activos puede ser menor.

Aunque se considera seguro para la mayoría, su consumo debe ser moderado. Las personas que toman anticoagulantes o tienen problemas de vesícula biliar deberían consultar a un especialista antes de incluirlo en su dieta. También se recomienda que las mujeres embarazadas consulten con un profesional de la salud para evitar posibles efectos adversos.

El uso de productos naturales o de suplementos para mejorar nuestra salud y bienestar están siempre condicionados a nuestro estado físico y a las posibles patologías que tengamos en el momento de consumirlos. Al margen de estas recomendaciones generales de expertos a la población, para utilizarlos correctamente debemos siempre consultar previamente con un especialista.