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Cómo evitar que la punta de las hojas de tu planta se pongan marrón: un sencillo truco para salvar su vida
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Cómo evitar que la punta de las hojas de tu planta se pongan marrón: un sencillo truco para salvar su vida

Es habitual que las plantas de interior presenten señales de estrés, como el cambio de color de sus partes. Con los cuidados adecuados, puedes evitar que se convierta en un problema mayor

Foto: Descubre las razones por las que las puntas de las hojas de tus plantas se secan (Fuente: iStock)
Descubre las razones por las que las puntas de las hojas de tus plantas se secan (Fuente: iStock)

Notar que las puntas de las hojas de tus plantas empiezan a secarse y tornarse marrones puede parecer una señal de alarma, pero es importante saber que este problema tiene solución. Conociendo las causas y actuando a tiempo, podrás devolverles su esplendor. Como habrás podido suponer, la ausencia de riego suele ser una de las principales razones, aunque no la única. Las plantas necesitan un flujo constante de agua que viaje desde las raíces hasta las hojas. Si no reciben suficiente, las puntas se resecan. Asegúrate de que el sustrato esté húmedo pero no empapado, y adapta el riego a las estaciones del año.

Otro factor puede ser un sustrato inadecuado o compactado. Si la tierra es demasiado porosa o está muy dura, el agua no llega correctamente a las raíces. Opta por un sustrato suelto y bien drenado para que la planta absorba lo que necesita.

La exposición al sol directo también puede dañar las hojas, especialmente en plantas de interior de origen tropical. Estas especies prefieren luz tamizada o semisombra. Colocarlas cerca de ventanas con cortinas ligeras o en lugares con luz indirecta es una buena solución.

El ambiente seco en interiores es otro enemigo común. Las plantas tropicales requieren altos niveles de humedad. Utilizar un humidificador, pulverizar ligeramente sus hojas o agrupar varias plantas juntas ayudará a crear un microclima más favorable.

El tamaño y la cantidad importan

No descuides el tamaño de la maceta. Si las raíces están apretadas y no tienen espacio, es hora de trasplantar. Un contenedor más amplio permitirá que las raíces crezcan saludables y absorban agua y nutrientes de manera adecuada.

El exceso de fertilizante es un error común. Abonar en exceso puede saturar el sustrato y quemar las raíces. Sigue siempre las instrucciones del producto y aplica fertilizante solo en las épocas de crecimiento activo, como primavera y verano.

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Por último, revisa que tu planta no esté expuesta a corrientes de aire frías. Las bajas temperaturas y el viento pueden causar estrés y secar las hojas. Reubica tus plantas en espacios con temperaturas estables y protegidos de cambios bruscos.

Detectar las puntas marrones es un recordatorio de que las plantas, como cualquier ser vivo, requieren cuidados específicos. Con pequeños ajustes, tus compañeras verdes volverán a lucir radiantes.

Notar que las puntas de las hojas de tus plantas empiezan a secarse y tornarse marrones puede parecer una señal de alarma, pero es importante saber que este problema tiene solución. Conociendo las causas y actuando a tiempo, podrás devolverles su esplendor. Como habrás podido suponer, la ausencia de riego suele ser una de las principales razones, aunque no la única. Las plantas necesitan un flujo constante de agua que viaje desde las raíces hasta las hojas. Si no reciben suficiente, las puntas se resecan. Asegúrate de que el sustrato esté húmedo pero no empapado, y adapta el riego a las estaciones del año.

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