"¿No tenéis hambre?": una francesa que vive en Madrid explica las costumbres españolas que no entiende
Pese a compartir frontera, franceses y españoles chocan por sus costumbres: horarios, vacaciones y tradiciones incomprensibles para ambas culturas. La francesa Kelly Gardfield desvela sus experiencias tras siete años viviendo en Madrid
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La relación entre franceses y españoles, pese a compartir una extensa frontera y lazos históricos, está llena de contrastes culturales que a menudo generan debates acalorados. Desde la gastronomía hasta los horarios y las costumbres laborales, ambos países se perciben mutuamente como fascinantes pero, a veces, sus costumbres chirrían al otro lado por incomprensibles, ya que cada cultura interpreta las tradiciones y la convivencia social de distinta manera.
Mientras los franceses critican el horario tardío de las cenas en España, los españoles se escandalizan al descubrir que en Francia el queso no se toma como aperitivo, sino antes del postre, o que no untan el paté o su respeto casi religioso por la sartén de crêpes. Estos pequeños detalles han alimentado una relación de amor y rivalidad entre ambas nacionalidades, que queda patente en los intercambios cotidianos y en las redes sociales.
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Otro tema recurrente que divide a ambos países es la gestión del tiempo. Mientras que en Francia el horario laboral tiende a ser más corto, en España se alargan las jornadas, lo que a muchos franceses les resulta incomprensible. Además, las costumbres sobre las vacaciones también generan asombro: los franceses disfrutan explorando destinos fuera de su país, mientras que para muchos españoles es casi un ritual regresar al mismo pueblo año tras año durante el verano.
Kelly Gardfield: "Hay cosas que no entiendo, y me duelen"
Kelly Gardfield, una francesa que lleva siete años viviendo en Madrid, ha compartido recientemente su experiencia a través de TikTok, generando un amplio debate en redes sociales. “Me encanta España, me encanta Madrid”, afirma al inicio de su relato, dejando claro que su intención no es criticar, sino expresar las diferencias culturales que, aún, después de tantos años, no ha logrado comprender... "y son muuuuuchas".
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Entre las tradiciones que más le cuesta asimilar, Kelly menciona con humor “que el bisabuelo, el abuelo, el padre, el hijo, el nieto tengan el mismo nombre, ¿para qué?”. También le resulta sorprendente el horario de las cenas: “El hecho de que cenáis después de las nueve. ¿No tenéis hambre?”. Además, le desconcierta la descentralización del sistema político: “Que cada comunidad haga lo que quiera. Que el poder no esté centralizado. Me lo han explicado mil veces, pero no lo entiendo”.
@miss.kells12 Las tradiciones Españolas que no entiendo 🇪🇸🇫🇷 #españa #madrid #francia #francesa #tradiciones #fyp #pourtoii #foryoupagе #viral_video ♬ Monkeyshine-JP - Lt FitzGibbons Men
Otra de las cosas que más le impactan a esta joven es "el hecho de odiar a los franceses, aunque a nosotros nos encanta España y nos encantan los españoles". Asimismo, habló sobre la jornada laboral de 40 horas: “Eso sí que me duele”. Kelly destaca también la peculiar tradición de hacer largas colas para comprar lotería de Navidad y el apego a los pueblos durante el verano: "¡Que vayáis todos los años al mismo pueblo dos meses!". Aunque estos aspectos le resulten difíciles de entender, Kelly asegura que su amor por España y su gente sigue intacto.
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La relación entre franceses y españoles, pese a compartir una extensa frontera y lazos históricos, está llena de contrastes culturales que a menudo generan debates acalorados. Desde la gastronomía hasta los horarios y las costumbres laborales, ambos países se perciben mutuamente como fascinantes pero, a veces, sus costumbres chirrían al otro lado por incomprensibles, ya que cada cultura interpreta las tradiciones y la convivencia social de distinta manera.