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Un farmacéutico advierte sobre el tiempo que no debemos superar sin cambiar las toallas
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Un farmacéutico advierte sobre el tiempo que no debemos superar sin cambiar las toallas

El correcto mantenimiento de las toallas es clave para evitar problemas de salud relacionados con la proliferación de microorganismos

Foto: ¿Sabes cada cuánto tienes que cambiar las toallas? (TikTok/ @Farmaceuticofernandez)
¿Sabes cada cuánto tienes que cambiar las toallas? (TikTok/ @Farmaceuticofernandez)

El uso diario de las toallas de baño puede convertirse en un riesgo potencial para la salud si no se realiza un mantenimiento adecuado. Según el farmacéutico Álvaro Fernández (@Farmaceuticofernandez), la falta de una limpieza regular puede favorecer la acumulación de bacterias y hongos, aumentando el riesgo de infecciones y problemas cutáneos.

Las toallas, al estar expuestas constantemente a la humedad y las células muertas de la piel, son un espacio idóneo para la proliferación de microorganismos. Fernández advierte que, tras el uso, las fibras de la toalla retienen humedad, lo que facilita el crecimiento de bacterias y hongos si no se secan adecuadamente. Este contacto repetido con la piel puede derivar en infecciones como foliculitis o irritaciones, especialmente en personas con piel sensible o con heridas abiertas.

Foto: Hay un truco para que las toallas no sólo mantengan su suavidad, sino que incluso recuperen la que perdieron (iStock)

Los expertos coinciden en que las toallas de baño deben lavarse cada tres usos como máximo, o cada dos días si se utilizan más de una vez al día. Para garantizar una limpieza adecuada, es necesario lavarlas a una temperatura de 60 grados, lo que permite eliminar eficazmente los microorganismos acumulados. Además, deben secarse en un lugar ventilado y evitar almacenarlas húmedas, ya que esto aumenta el riesgo de contaminación bacteriana.

El farmacéutico Fernández también destaca la importancia de no compartir toallas, ya que esto puede facilitar la transmisión de infecciones entre diferentes personas, especialmente si alguna de ellas padece problemas cutáneos.

Para mantener un nivel óptimo de higiene, se recomienda utilizar un juego de toallas exclusivo para cada persona y reemplazarlas regularmente si presentan desgaste, como fibras dañadas o malos olores persistentes. Asimismo, las toallas destinadas al cuidado facial o al cabello deben recibir una atención especial, ya que están en contacto con zonas más sensibles.

Los especialistas subrayan que incorporar estos hábitos no solo ayuda a prevenir problemas dermatológicos, sino que también fomenta una rutina de higiene más saludable para el día a día.

El uso diario de las toallas de baño puede convertirse en un riesgo potencial para la salud si no se realiza un mantenimiento adecuado. Según el farmacéutico Álvaro Fernández (@Farmaceuticofernandez), la falta de una limpieza regular puede favorecer la acumulación de bacterias y hongos, aumentando el riesgo de infecciones y problemas cutáneos.

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