Soy experto en finanzas y así conseguí ahorrar el doble en un mes dejando de usar tarjetas de crédito

David Delisle, autor de The Golden Quest y experto en finanzas personales, decidió llevar a cabo un experimento sencillo pero revelador: dejó de utilizar tarjetas de crédito durante un mes y se centró en pagar con dinero en efectivo. Su objetivo era observar cómo este cambio afectaría sus hábitos de consumo y su capacidad de ahorro. Los resultados, según compartió con Best Life, fueron sorprendentes y le permitieron duplicar la cantidad de dinero que ahorraba.

El experimento no estuvo exento de retos, especialmente por la conveniencia que ofrecen las tarjetas de crédito. Delisle reconoció que pagar en efectivo era "un dolor de cabeza" debido a la incomodidad de manejar billetes y monedas. Sin embargo, destacó que esta pequeña incomodidad resultó ser clave para transformar su relación con el dinero. Según explicó, “el acto de contar billetes y recibir cambio hacía que las compras fueran menos automáticas y más reflexivas”. Además, observar cómo el dinero físico desaparecía de su cartera le generaba un impacto visual que las transacciones con tarjeta no ofrecían.

El uso exclusivo de efectivo le permitió evaluar con más cuidado cada compra. “Esa pausa para pensar si realmente quería algo o si valía la pena contar los billetes me hizo detener la mayoría de mis gastos innecesarios”, explicó. Entre los mayores cambios, Delisle notó una drástica reducción en gastos como café, comida rápida y ropa, categorías donde sus compras solían ser impulsivas. “Me di cuenta de que muchas cosas las compraba por hábito y no porque realmente las quisiera”, comentó.

“Después de unos días, se convierte en un hábito y empiezas a ver cómo tus gastos cambian”

Delisle a través de esta experiencia personal demostró que pequeños cambios, como sustituir las tarjetas por efectivo, pueden generar un impacto significativo en los hábitos financieros. A pesar de los beneficios, Delisle señaló que no siempre es posible prescindir por completo de las tarjetas de crédito, especialmente para gastos automáticos como suscripciones digitales o servicios de streaming.

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P. C.

Sin embargo, abogó por incorporar el uso de efectivo siempre que sea posible como una herramienta para fomentar una mayor consciencia financiera. “Simplemente empezar es lo más difícil”, recomendó para quienes quieran intentar un desafío similar. “Después de unos días, se convierte en un hábito y empiezas a ver cómo tus gastos cambian”.