El pueblo de Burgos que perfectamente podría estar recreado en el mundo de 'El Señor de los Anillos'

Si eres un fanático del mundo de Tolkien y siempre has soñado con caminar por paisajes que parecen sacados directamente de El Señor de los Anillos, no tienes que viajar hasta Nueva Zelanda. Existe un rincón mágico en España, concretamente en el norte de la provincia de Burgos, que bien podría haber inspirado el universo de la Tierra Media. Este lugar es el Complejo Kárstico de Ojo Guareña, un paraje que combina la belleza natural con la historia y el misterio, y que parece sacado de un cuento fantástico.

Ojo Guareña esconde una joya que maravillará a quienes busquen escenarios tan impresionantes como los descritos por Tolkien. Se trata de una ermita situada en el interior de una cueva, decorada con pinturas que tienen más de 300 años de antigüedad. Este refugio de tranquilidad y espiritualidad, rodeado de un entorno sobrecogedor, parece el sitio ideal para que personajes como Frodo o Gandalf se detuvieran a descansar en su camino. Y para los aventureros más intrépidos, hay una sección de la cueva donde se encuentran restos de huesos antiguos, que dotan al lugar de un aire de misterio y antigüedad digno de la Tierra Media.

Gonzalo, un famoso tiktoker por sus contenidos sobre viajes y sitios extraordinarios, ha estado allí y ha grabado un vídeo para que sus seguidores acudan al sitio, que cada vez está acaparando más la atención tanto de los burgaleses como del resto de España. "¡Bienvenido a Ojo Guareña!", ha comentado el tiktoker, haciendo referencia al parecido de sus paisajes a los de la ficción de Tolkien.

Este complejo natural no es solo una maravilla estética; es también el conjunto de cuevas más extenso de la península ibérica, con casi 100 kilómetros de galerías subterráneas. Ojo Guareña ocupa un puesto privilegiado entre las diez formaciones kársticas más grandes del mundo. A nivel científico, su estructura es fascinante: algunas de sus galerías están fosilizadas, mientras que otras siguen activas, con ríos que fluyen por su interior como si de los intrincados caminos subterráneos de Moria se tratase.

Una fauna impresionante

El interés de Ojo Guareña no se limita a sus dimensiones. En su interior se han descubierto varios santuarios prehistóricos y hasta 63 especies de invertebrados cavernícolas, de las cuales cuatro son exclusivas de esta cueva. Para los amantes de la fauna, la zona también es un refugio natural para aves rapaces como el águila real y el buitre leonado, así como mamíferos como el lobo y el corzo. Este enclave se convierte así en un lugar donde la naturaleza y la historia conviven en perfecta armonía.

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La morfología del complejo es igualmente impresionante. Su paisaje se caracteriza por un relieve de cuestas que separa dos regiones biogeográficas: la Región Eurosiberiana y la Región Mediterránea, según podemos leer en la web Las Merindades. Este contraste da lugar a valles verdes y fértiles, así como a laberintos de cuevas formados por los ríos Guareña y Trema, que se adentran en el terreno y resurgen kilómetros más abajo. Sin duda, un paisaje que podría fácilmente haber sido parte de la travesía de los hobbits.