Recomienda echar sal al café por esta razón y sus seguidores estallan: “Directo a la taza, pero del inodoro”
El café es una de las bebidas más populares a nivel mundial, disfrutada diariamente por millones de personas debido a su capacidad para proporcionar energía
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El café suele combinarse con azúcar, leche o sacarina para suavizar su sabor amargo y adaptarlo a distintos gustos personales. El azúcar y la leche aportan dulzura y cremosidad, mientras que la sacarina es una alternativa común para aquellos que buscan reducir el consumo de calorías sin renunciar a un toque dulce.
Es por ello que la combinación de café y sal, tal y como ha compartido en un vídeo de Instagram el creador de contenido (@ds.cohen), ha sorprendido a muchos. Esta propuesta ha generado un intenso debate entre sus seguidores, muchos de los cuales ven como una aberración este ingrediente para el café. Pero, aunque para algunos esta práctica puede parecer extraña, la idea de añadir sal al café tiene un trasfondo científico que la respalda.
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El uso de sal en el café no es un concepto nuevo, y Alton Brown, una referencia en la cultura gastronómica estadounidense y científico alimentario, ha defendido esta técnica durante años. Según Brown, una pequeña cantidad de sal puede reducir la amargura del café y, al mismo tiempo, realzar los sabores más dulces del grano.
El fundamento científico detrás del truco
La explicación científica detrás de esta técnica se encuentra en la activación simultánea de los receptores del sabor amargo y salado en la lengua. Este fenómeno, conocido como percepción intermodal, hace que la sal disminuya la amargura del café, lo que permite que se perciban mejor los matices dulces del mismo. “Solo necesitas una pizca, no más de media cucharadita por taza”, recomendó el creador de contenido en su vídeo, enfatizando que el uso excesivo de sal podría tener el efecto contrario.
En muchas culturas, especialmente en regiones donde el café es una bebida central en la dieta diaria, esta técnica ha sido utilizada desde hace décadas, al igual que se hace añadiendo sal a algunos postres, o en los vasos de Margarita. Al añadir una mínima cantidad de sal, las personas logran disfrutar de un café más equilibrado sin la necesidad de añadir azúcar o leche, lo que puede ser beneficioso para aquellos que buscan reducir el consumo de estos ingredientes.
La reacción en redes sociales
La respuesta a esta práctica en redes sociales ha sido mixta. Algunos usuarios han acogido con entusiasmo la sugerencia, probando el método y compartiendo sus impresiones positivas. “Nunca pensé que añadir sal al café pudiera mejorar tanto su sabor”, afirmó un usuario en los comentarios del vídeo viral. No obstante, otros se han mostrado más escépticos, afirmando que esta combinación simplemente no es para ellos y que así el café va “directo a la taza pero del inodoro”.
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El café suele combinarse con azúcar, leche o sacarina para suavizar su sabor amargo y adaptarlo a distintos gustos personales. El azúcar y la leche aportan dulzura y cremosidad, mientras que la sacarina es una alternativa común para aquellos que buscan reducir el consumo de calorías sin renunciar a un toque dulce.