¿Sabes qué santos se celebran hoy, 18 de septiembre? Consulta el santoral
La jornada de hoy también honra a otros santos y beatos que han dejado una marca en la historia de la Iglesia
Hoy, 18 de septiembre, la Iglesia Católica celebra a San José de Cupertino, un santo que destaca por su historia peculiar y su profunda espiritualidad. Nacido en una familia humilde en Italia, tuvo una infancia marcada por las dificultades económicas. A pesar de sus intentos de ingresar en la Orden Franciscana, inicialmente fue rechazado. Más tarde, se unió a los Hermanos Menores Capuchinos, aunque fue expulsado debido a su "personalidad despistada", según la tradición. Sin embargo, su perseverancia lo llevó finalmente a convertirse en un fraile franciscano y, en 1625, fue ordenado sacerdote.
San José de Cupertino es conocido por sus éxtasis durante la oración y por sus famosas levitaciones, eventos que la tradición atribuye a su profunda conexión con lo divino. Estas experiencias místicas le valieron la prohibición de celebrar misa en público y rezar en comunidad, tal como relatan sus biógrafos. Fue canonizado el 16 de julio de 1767 por el Papa Clemente XIII y es recordado con especial devoción cada 18 de septiembre.
Además de San José de Cupertino, el santoral de hoy incluye a otras figuras importantes de la Iglesia. Entre ellas se encuentran:
- San Eurmenio de Gortina
- San Eustorgio de Milán
- San Ferréolo de Limoges
- San Ferréolo de Vienne
- San Océano de Nicomedia
- San Senario de Avranches
- San Ricarda de Andlau
- Santo Domingo Trach
- Beato Carlos Eraña Guruceta
Es un día de celebración para aquellos que llevan el nombre de José, aunque su festividad principal es el 19 de marzo, coincidiendo con el Día del Padre. Según el Instituto Nacional de Estadística, más de 500.000 hombres en España llevan este nombre, un testimonio de la popularidad de San José en la cultura española.
Hoy, 18 de septiembre, la Iglesia Católica celebra a San José de Cupertino, un santo que destaca por su historia peculiar y su profunda espiritualidad. Nacido en una familia humilde en Italia, tuvo una infancia marcada por las dificultades económicas. A pesar de sus intentos de ingresar en la Orden Franciscana, inicialmente fue rechazado. Más tarde, se unió a los Hermanos Menores Capuchinos, aunque fue expulsado debido a su "personalidad despistada", según la tradición. Sin embargo, su perseverancia lo llevó finalmente a convertirse en un fraile franciscano y, en 1625, fue ordenado sacerdote.
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