Así es como la personalidad afecta a tu felicidad, según la ciencia
Encontrar la plenitud vital en nuestro día a día es un objetivo que comparten millones de personas en nuestra sociedad. Sin embargo, es un elemento que depende más de nuestra forma de ser de lo que pudiera parecer.
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Uno de los principales objetivos que cualquier individuo se propone conseguir a lo largo de su vida es, sin duda, ser feliz. Sin embargo, esta meta puede ser difícil de lograr, ya que quizás no estamos contentos con nuestras relaciones con los demás, disponemos de un trabajo en el que no nos sentimos realizados, o nuestro hogar no es como nos lo habíamos planteado.
No obstante, es posible que estas circunstancias no sean las que determinan nuestra felicidad. Un nuevo estudio ha investigado cuáles son los motivos por los que una persona puede llegar a ese estado mental y emocional. Sus resultados son tan reveladores que pueden generar cambios en cómo percibimos estos objetivos, ya que, según los mismos, hay un rasgo que puede ser crucial en este sentido.
Se trata de la personalidad. El conjunto de elementos que marca nuestra forma de ser y de pensar, además de dotarnos de una identidad diferenciadora del resto de individuos, es fundamental para esclarecer el grado de satisfacción que sentimos en nuestra vida cotidiana. Es por ello que cambiar elementos sociales o laborables puede no tener el efecto que esperamos.
¿Qué elementos te hacen feliz?
En la investigación, de origen estonio, se estudió a más de 20.000 sujetos adultos sobre su satisfacción en diferentes ámbitos de su vida. También completaron una encuesta en la que reflejaron varios rasgos que evidenciaban el tipo de personalidad que poseían. Además, para evitar el sesgo personal de la percepción que tenían sobre ellos mismos, otra persona de confianza realizaba el mismo test sobre ellos para contar con información más precisa.
Las conclusiones reflejaron que las personas menos neuróticas y más conscientes y extrovertidas tendían a estar más satisfechas con su vida en gran parte de sus ámbitos. Por el contrario, se percibía una gran insatisfacción en los usuarios que se caracterizaban por su amabilidad y apertura a la experiencia. Además, se detectaron ciertos aspectos específicos que iban mucho más ligados a la plenitud vital que otros.
Un ejemplo de ello es que las personas que solían correr riesgos de manera más habitual o que pedían disculpas sin mayores problemas, tendían a estar más satisfechas con sus propias vidas. A esto se le sumaron los sujetos que disponían de un gran compromiso con su familia, que poseían un fuerte sentimiento de lealtad o que respetaban la autoridad.
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