Este entrenador desvela su truco para mejorar el equilibrio con 60 años mientras estamos en la cocina

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A medida que envejecemos, la pérdida de equilibrio y la reducción de la fuerza muscular se convierten en factores importantes que aumentan el riesgo de caídas y fracturas, especialmente en personas mayores de 60 años. Estos incidentes pueden provocar graves lesiones, como fracturas de cadera, que impactan significativamente en la calidad de vida, limitando la movilidad y aumentando la dependencia de otros.

Por ello, resulta esencial incorporar prácticas cotidianas que ayuden a fortalecer el equilibrio y la musculatura, siempre con ejercicios adaptados a la edad y a las capacidades físicas de cada uno. En esto es experto Deron Buboltz, un entrenador de fitness para sénior que ha compartido en un vídeo de TikTok una manera excelente de entrenar nuestro equilibrio cuando estamos en la cocina.

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Lo mejor de este ejercicio es que no requiere más que unos minutos, el propio cuerpo y un punto de apoyo firme, como la encimera de la cocina o una mesa. “Todo lo que necesitas es a ti mismo y algo resistente a lo que agarrarte”, afirma Buboltz, subrayando la accesibilidad y la efectividad de estos movimientos para quienes buscan mantener su equilibrio y fuerza con el paso de los años.

Ejercicio sencillo para mejorar el equilibrio

El ejercicio propuesto consiste en, mientras nos apoyamos con una mano en una encimera, realizar pequeños círculos con la pierna exterior, primero hacia adelante y luego hacia atrás, asegurándonos de mantener una postura erguida. “Quiero que hagas pequeños círculos una y otra vez hacia adelante. Harás eso 12 veces. Luego, volverás a ir hacia atrás”, explica el entrenador.

Tras completar estas repeticiones, se procede a un segundo movimiento: levantar la pierna ligeramente, mantenerla en el aire por un breve momento y luego bajarla con control. Este ciclo debe repetirse 12 veces antes de cambiar de pierna, siempre con la confianza de un punto de apoyo, tal y como muestra en su vídeo.

Estos ejercicios, que pueden integrarse fácilmente en la rutina diaria, son fundamentales para contrarrestar los efectos del envejecimiento en el equilibrio y la fuerza muscular. Realizarlos con regularidad permite mejorar la estabilidad, fortalecer los músculos y reducir significativamente el riesgo de caídas.

La práctica constante de estos movimientos, especialmente cuando se realizan con la técnica adecuada, se convierte en un valioso aliado para quienes desean mantenerse activos e independientes en la tercera edad. Incorporar estas rutinas en la vida diaria no solo fortalece el cuerpo, sino que también contribuye a preservar la autonomía y la calidad de vida.