La cosa más rara que ha visto esta joven que trabajó en un yate de millonarios: "Llenaban la bañera"

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Trabajar en un yate de lujo no solo implica conocer destinos paradisíacos y atender a la élite: también ser testigo de las extravagancias más inimaginables. Giselle Azueta, una joven que trabajó en yates de millonarios, compartió en un vídeo de su canal de TikTok la experiencia más insólita que vivió durante su tiempo en alta mar.

Una vez, a bordo de uno de estos opulentos yates, Giselle se encontró con una petición que aún le cuesta creer. “Tuvimos unos huéspedes donde la mujer nos pedía que llenáramos su tina con agua Evian”, relata Azueta. Sí, así como lo leen, esta mujer no se bañaba con agua corriente. Solo aceptaba sumergirse en una tina llena de agua embotellada.

La logística detrás de este capricho resultaba increíble. “Literal, pedíamos yo creo que unas 400 botellas de agua al día, porque solo podíamos conseguir las de 500 mililitros”, explica Giselle. Llenar una bañera con cientos de botellas de agua Evian se convirtió en una tarea rutinaria durante la estancia de estos huéspedes. “Era una locura”, confiesa.

Para cualquiera que no pertenezca al exclusivo mundo de los multimillonarios, esta anécdota puede parecer sacada de una novela de ficción. Sin embargo, para Giselle, fue una lección sobre cómo algunas personas utilizan su riqueza de formas inimaginables. La joven se cuestiona: “¿Ustedes se bañarían con solo botellas de agua para llenar la bañera?”.

Lecciones de lujo

Las extravagancias de los superricos pueden ser sorprendentes y, a veces, difíciles de comprender para el común de los mortales. Giselle concluye su historia reflexionando sobre cómo algunas personas eligen gastar su dinero en caprichos que, aunque exóticos, son su particular forma de vivir una vida de lujo sin límites.