Así debes limpiar tus zapatillas para que queden como nuevas
Aunque cada zapatilla es un mundo, siempre hay un modo de dejarlas relucientes y que parezcan recién estrenadas. No importa si son de piel, si son blancas o están amarillentas
Las zapatillas deportivas son un básico que perdura en el tiempo. Su comodidad y el hecho de que puedan combinarse con cualquier tipo de vestimenta, incluso con un traje o vestido, hacen que la cultura sneaker cuente cada vez con más seguidores. Y no es para menos, porque a pesar de ser un calzado atemporal, cada temporada surgen modelos nuevos y han llegado a convertirse en objeto de deseo para los amantes del streetwear.
Por este motivo, si te consideras un verdadero fan del fenómeno sneaker, seguro que querrás llevar tus zapatillas siempre impolutas. Por eso te traemos unos trucos caseros con los que podrás limpiar tus zapatillas de manera fácil, sencilla y sin apenas esfuerzo. El resultado nos dará la razón y podrás dejar tu calzado deportivo como recién estrenado.
Para empezar, es primordial saber diferenciar el material con el que se han hecho. No es lo mismo unas zapatillas de piel que unas sneakers de tela. Tampoco es lo mismo que sean blancas o de color o lavarlas a mano que en la lavadora. Pero no te preocupes porque hay remedio para todo, incluso para las zapatillas que han amarilleado con el tiempo.
Zapatillas de piel y de tela
Para limpiar unas zapatillas deportivas de piel existe un método muy sencillo. Primero se pasa un cepillo para quitarles los restos de suciedad y después se pasa un paño húmedo con jabón neutro sobre las manchas. También pueden servir las toallitas húmedas. Una vez acabado, se dejan secar al aire libre, pero a la sombra, ya que el sol puede dañarlas. Para darle brillo se usa una crema incolora.
Por el contrario, si las sneakers son de tela basta con llenar un cubo de agua tibia en donde se echará 1 o 2 cucharadas de detergente suave para la ropa. Realizada la mezcla hasta hacer espuma, se coge una zapatilla y se frota su exterior con un cepillo de dientes o una esponja. Después se quitan los cordones y las plantillas y se meten ligeramente en el agua para eliminar la suciedad y seguir frotando. Luego se enjuagan con agua limpia (también tibia) y se usa una toalla para eliminar el exceso de agua. Se dejan secar en un lugar cálido y seco, alejados del calor directo.
Para blanquear la suela de las zapatillas, que normalmente son de plástico y cogen un color amarillento por el uso y el paso del tiempo, se usa pasta de dientes. Se aplica sobre la superficie y se frota con un cepillo de dientes viejo humedecido y envuelto en un paño. También se puede optar por una mezcla de bicarbonato y vinagre. Se procede igual que con la pasta dentífrica, pero antes de retirar el producto hay que enjuagar con agua. Se deja secar al sol durante unos 30 minutos para que el efecto sea más visible.
Con estos trucos podrás dejar tu calzado deportivo como si los estuvieras estrenando de nuevo
Ya te hemos contado como limpiar zapatillas a mano, pero para hacerlo en la lavadora debes tener en cuenta los siguientes consejos para que no se estropeen. Lo primero es quitar los cordones y las plantillas y eliminar los restos de suciedad superficial. Hecho esto, se meten las sneakers en una bolsa de tela o en una malla de ropa delicada y se pone un programa corto en agua fría y sin centrifugar. Acabada la lavadora, se ponen a secar en un sitio aireado, pero sin que le dé la luz solar de pleno.
Las zapatillas deportivas son un básico que perdura en el tiempo. Su comodidad y el hecho de que puedan combinarse con cualquier tipo de vestimenta, incluso con un traje o vestido, hacen que la cultura sneaker cuente cada vez con más seguidores. Y no es para menos, porque a pesar de ser un calzado atemporal, cada temporada surgen modelos nuevos y han llegado a convertirse en objeto de deseo para los amantes del streetwear.