Intentan enseñar a su perro a meterse en una jaula... y terminan atrapados dentro
El vídeo de una pareja norteamericana se viraliza después de que, entre bromas, ambos terminaran encerrados en una jaula como la de su mascota
Enseñar a un perro a hacer todo aquello que sus dueños quieren no es fácil. Se necesita de mucha paciencia y un entrenamiento para que, poco a poco, el can vaya entendiendo lo que se quiere de él. Y la mejor herramienta en estos casos es utilizar premios para que, cada vez que la mascota complete lo que se le pide, reciba un refuerzo positivo por lo que ha conseguido.
La pareja que protagoniza esta historia estaba enseñando a su mascota a introducirse en una jaula por sí mismo. Se ve que habían practicado con su perro en varias ocasiones, ya que, cuando le piden que vuelva a la jaula, el can obedece y se va directo a seguir las órdenes de sus dueños. Sin embargo, lo que iba a pasar a continuación no lo veíamos venir.
La pareja estaba pasando un buen rato en su casa y el buen humor era la nota característica. Así que después de que el perro se introdujera por su propio pie en la jaula, la dueña pidió a su pareja que hiciera lo mismo y siguiera los pasos de su mascota. El hombre no lo dudó y se puso a cuatro patas, introduciéndose en la segunda jaula y encerrándose como si fuera un perro más.
No podían salir
Pero la cosa no iba a terminar ahí. Después de que el perro y su dueño ocuparan dos jaulas, a la mujer no se le ocurrió nada mejor que meterse ella misma en la tercera jaula disponible. No sabemos si la pareja tiene tres perros o los piensan tener en un futuro, pero el caso es que hay tres jaulas de gran tamaño en el salón de su casa y la dueña ocupó la última disponible, encerrándose por dentro. Ahí llegaron los problemas.
De repente, los dos miembros de la pareja se dan cuenta de que se han quedado atrapados y no pueden salir. Después de algunos minutos, el joven se las apaña para mover la jaula desde el interior y colocarse delante de la puerta de la jaula de su mujer, de tal manera que pudiera abrirla y salir al exterior. Después, ella ya pudo abrir a su marido para que también pudiera escapar y todo quedara en un susto.
La historia la ha compartido el diario norteamericano USA Today y no ha tardado en viralizarse en las redes sociales, recibiendo multitud de comentarios divertidos. De los protagonistas solo sabemos que viven en el estado norteamericano de California y que se lo pensarán dos veces la próxima vez que quieran divertirse con su mascota encerrándose en su jaula.
Enseñar a un perro a hacer todo aquello que sus dueños quieren no es fácil. Se necesita de mucha paciencia y un entrenamiento para que, poco a poco, el can vaya entendiendo lo que se quiere de él. Y la mejor herramienta en estos casos es utilizar premios para que, cada vez que la mascota complete lo que se le pide, reciba un refuerzo positivo por lo que ha conseguido.