Cómo limpiar correctamente la pantalla de la televisión sin rayarla y dejarla como nueva
Existe un método casero muy sencillo y asequible para limpiar nuestra televisión sin riesgo a que se raye la pantalla ni sufra ningún tipo de daño.
Si no limpiáis cada cierto tiempo vuestra televisión, será inevitable que vayan apareciendo manchas y motas de polvo que empañen vuestra experiencia a la hora de ver películas, series o programas, o de jugar a la consola. Sin embargo, también hay que tener mucho cuidado cuando nos decidamos a limpiarla, ya que podríamos ocasionarle daños o rayarla, con lo que la solución sería aún peor que el problema.
Para evitar estos contratiempos, la web Enséñame de Ciencia ha publicado hace poco unas recomendaciones básicas para el proceso de limpieza de una televisión, las cuales procedemos a resumiros aquí y que incluyen un remedio casero barato y eficaz. Lo primero que hay que tener en cuenta es que, antes de nada, debemos asegurarnos de que el aparato no sólo está apagado, sino también desconectado durante el proceso de limpieza
.En vez de comprar productos específicos para esta labor, que pueden resultar caras, la mencionada web propone que elaboremos un limpiador casero que es totalmente seguro y que no ocasionará ningún daño a nuestra televisión. Estos son los únicos cuatro elementos que necesitamos:
- Una taza de agua destilada
- Un cuarto de taza de vinagre blanco
- Un atomizador
- Una microfibra
Al mezclar los dos líquidos y meterlos en el atomizador, ya tendremos listo el remedio. En cuanto a la microfibra, nos sirve por ejemplo la que usemos para nuestras gafas, y los únicos requisitos son que sea suave y esté seca. Importante: tiene que ser una microfibra, porque si optáis por una alternativa como papel, ropa o servilletas corréis el riesgo de rayar la pantalla. Al rociar la mezcla sobre la microfibra, ya podremos pasar a la acción de limpiar la televisión con ella.
Cómo usar el limpiador casero
Tras haber rociado la microfibra, hay que pasarla de forma suave, circular y uniforme sobre la pantalla. Es importante que no presionemos fuerte y que hagamos los movimientos de forma natural y delicada, para así evitar cualquier tipo de daño. En cualquier caso, siguiendo este método sería muy raro que llegaseis a rayar el aparato, y a no ser que apretéis con demasiada fuerza el proceso se desarrollará de forma normal, y pronto veréis cómo las manchas que pueda haber en la televisión van desapareciendo.
Basta con pasar suavemente la microfibra con el limpiador casero por la pantalla
También podéis aprovechar para limpiar el marco y la base del televisor. Esas partes no son tan sensibles como la pantalla, y en ellas sí podéis utilizar toallas de papel, limpiadores multiusos, etc. Lo único es que, si lo hacéis así, evitéis a toda costa que esos productos lleguen a tocar la pantalla.
Una vez quedéis satisfechos con el resultado, es mejor que no os preocupéis por secarla, ya que utilizar cualquier otro objeto para ese fin podría ser lo que acabe rayándola. Si la dejáis un rato sin tocarla, el limpiador casero que habéis aplicado se secará solo en poco tiempo, y una vez que veáis que es así ya podréis volver a conectarla y encenderla (mejor dejad pasar algo de tiempo, por si acaso).
Si no limpiáis cada cierto tiempo vuestra televisión, será inevitable que vayan apareciendo manchas y motas de polvo que empañen vuestra experiencia a la hora de ver películas, series o programas, o de jugar a la consola. Sin embargo, también hay que tener mucho cuidado cuando nos decidamos a limpiarla, ya que podríamos ocasionarle daños o rayarla, con lo que la solución sería aún peor que el problema.