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La oración escrita más antigua de la historia sigue siendo legible y trata sobre piojos
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Humanos vs piojos, la contienda eterna

La oración escrita más antigua de la historia sigue siendo legible y trata sobre piojos

Tallada en el lateral de un peine de marfil, con letras de 1 a 3 milímetros de ancho, parece invocar la posibilidad de acabar así con estos pequeños insectos

Foto: Imagen del peine tallado. Fuente: Dafna Gazit.
Imagen del peine tallado. Fuente: Dafna Gazit.

"Que este colmillo desarraigue los piojos del cabello y la barba", podría ser una frase cualquiera. Nada raro es la necesidad impetuosa que toda persona siente por acabar con estos insectos que se divierten en nuestras cabezas. Sin embargo, no es en absoluto una frase cualquiera. Muestra, nada más y nada menos, que esta contienda siempre estuvo ahí.

Tallada en el lateral de un peine de marfil, con cada palabra que la compone cuidadosamente inscrita en letras de 1 a 3 milímetros de ancho, se trata de la oración legible más antigua escrita con el primer alfabeto. Una súplica que es mucho más que eso.

Foto: Antiguo palacio asirio. (iStock)

La escritura surgió en Mesopotamia y Egipto hace unos 5200 años. Aquellos primeros sistemas de escritura no eran alfabéticos, sino conjuntos de signos que representaban entre sí sílabas y palabras. ¿De dónde surge entonces esta plegaria tan parecida a la que podríamos expresar hoy en día?

El misterio de la expresión

El origen del alfabeto es un misterio debido a la falta de evidencia arqueológica hasta la fecha, aunque los historiadores creen que probablemente fue inventado en Egipto, o al menos cerca de allí. En cuanto a la fecha, hay quien sostiene que fue hace unos 3.800 años, pero hay ciertas evidencias de que ya se usaba desde hace 4.300 años.

placeholder Fuente: Daniel Vainstub, Madeleine Mumcuoglu, Michael G. Hasel et al.
Fuente: Daniel Vainstub, Madeleine Mumcuoglu, Michael G. Hasel et al.

Comenzó como un sistema más claro de expresión, con ciertos jeroglíficos egipcios antiguos reutilizados para formar las letras alfabéticas que en la actualidad conocemos. Cada una de dichas letras representa una pequeña unidad de habla llamada fonema.

Asimismo, tampoco está muy claro cómo lo usaban entonces, porque los textos más antiguos hallados son muy breves y, debido al desgaste del tiempo, resultan difíciles de descifrar. Es por ello que esta nueva frase contra los piojos es tan importante.

Un mensaje milenario

El descubrimiento sucedió en 2016 cuando Yosef Garfinkel, de la Universidad Hebrea de Jerusalén, se encontraba trabajando en una zona arqueológica en Tel Lachish junto a otros compañeros, pero por el tamaño de sus letras se pasó por alto hasta 2021, cuando la investigadora asociada Madeleine Mumcuoglu de la Universidad Hebrea de Jerusalén encontró la oración mientras hacía zoom a una foto del peine, según señala la periodista de CNN Katie Hunt.

"Tienes un peine y el deseo de destruir los piojos desatados en tu cabello. Hoy en día tenemos productos modernos para ello, pero en el pasado no los tenían"

Mumcuoglu había estado estudiando restos de piojos encontrados en el artefacto, y de pronto, allí estaba el mensaje, sacado de entre un conjunto de restos de hace aproximadamente 2.700 años. No obstante, por el estilo de la escritura grabada en él (en el idioma de los cananeos, un grupo que vivió entre las áreas de Siria, Jordania, Líbano y Palestina) el equipo de Garfinkel apunta que este objeto en particular sería al menos 1.000 años más antiguo.

"La inscripción es muy humana", apuntaba Garfinkel al respecto en una entrevista para The Guardian: "Tienes un peine, y con él tienes el deseo de destruir los piojos desatados en tu cabello. Hoy en día tenemos productos modernos para ello, pero en el pasado no los tenían".

placeholder Fuente: Daniel Vainstub, Madeleine Mumcuoglu, Michael G. Hasel et al.
Fuente: Daniel Vainstub, Madeleine Mumcuoglu, Michael G. Hasel et al.

Según recoge el periodista Colin Barras en New Scientist, el investigador Christopher Rollston, de la Universidad George Washington, sostiene que las primeras inscripciones alfabéticas son generalmente muy breves, solo un puñado de letras, y a menudo consisten en el nombre de una persona o el nombre de un objeto, por eso también es tan relevante esta frase.

Si bien es cierto que existen algunas inscripciones largas del mismo período que la de este peine, los investigadores que han intentado entenderlas han tenido problemas para hacerlo, pues son pedazos de textos o mensajes más extensos, por lo que no está claro qué trataban de decir exactamente. Esta oración, sin embargo, establece una comunicación directa entre aquellas personas y todos los que cohabitamos el mundo hoy junto a los eternos piojos.

"Que este colmillo desarraigue los piojos del cabello y la barba", podría ser una frase cualquiera. Nada raro es la necesidad impetuosa que toda persona siente por acabar con estos insectos que se divierten en nuestras cabezas. Sin embargo, no es en absoluto una frase cualquiera. Muestra, nada más y nada menos, que esta contienda siempre estuvo ahí.

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