Los extraños inventos tecnológicos antiguos que todavía no tienen demasiada explicación

De la antigüedad, a menudo, nos queda un halo de misterio casi incontestable. Podemos reconocer, a través de cada mínimo vestigio humano que se ha impuesto al tiempo, una anterioridad, una pertenencia, pero no es extraño que ese diálogo sostenido a lo largo de los siglos burle toda lógica actual.

¿Qué significa el desarrollo? ¿Qué es esa idea del avanzar? ¿Cuál es el camino seguido? Muchas preguntas aparecen cuando miramos hacia atrás, más aún si en ese atrás aparecen tecnologías que, a día de hoy, nadie parece entender.

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Los inventos más sorprendentes de Leonardo Da Vinci

Ada Nuño

Desde materiales más resistentes que cualquier cosa que se te ocurra hasta sustancias seriamente peligrosas, la tecnología antigua es la definición misma de lo inexplicable en el presente. Estas son algunas de ellas.

El fuego griego

Durante el Imperio Bizantino (aproximadamente entre el 395 y el 1453) una sustancia pegajosa muy inflamable cobró la forma de herramienta más o menos habitual en los enfrentamientos. Se lanzaba a los oponentes sin ningún tipo de pudor con el fin de abatirlos. Considerado por algunos como un precursor del napalm, el fuego griego, como se le denomina actualmente, se usó sobre todo en el agua.

Al igual que el peligroso invento del siglo XX, aquella sustancia anterior conseguía mantenerse en llamas, incluso en contacto con la materia húmeda. Se trató de "una tubería montada en barcos bizantinos que rocía un fuego espeso, similar a un gel, a los vehículos enemigos", según describen desde Listverse. ¿Cómo surgió? ¿Cómo se encontró la posibilidad de ponerla en práctica? Según los informes de historiadores, duró hasta el siglo XIV, aunque tampoco se sabe por qué, solo puede intuirse.

Extraño hormigón romano

La ingeniería destaca siempre la durabilidad de las estructuras marinas romanas a lo largo de los tiempos, y resulta que detrás de ello está, nada más y nada menos, que el agua de mar, presente como parte de la mezcla en sí.

Puede que nuestra noción acerca del hormigón resulte moderna. Sin embargo, el material de base, o su antecedente, existe desde hace milenios. No obstante, aunque los científicos han podido identificar este hecho, sigue sin conocerse el total exacto de ingredientes detrás de este asombroso material de construcción antiguo.

Eso sí, se sabe que usaron una versión con ceniza puzolánica, lo que supuestamente lo hizo más duradero. "Mientras que el hormigón moderno está diseñado para durar 50 años, el hormigón romano antiguo ha durado más de 2000 años, a menudo bajo el agua", apuntan desde Science Sensei.

Los cálculos de Bha skara cha rya

Calcular la rotación del globo terráqueo parece un asunto complejo imposible de ponerse sobre la mesa hasta el advenimiento de las matemáticas modernas. Pues bien, si eso crees, debes saber que estás muy equivocado. Aún quedaba tiempo para que llegara ese momento de la historia, cuando en el siglo XII, un astrónomo indio llamado Bha skara cha rya logró establecer el ciclo clásico de 365 días, tan asumido hoy.

Como apuntan desde Science Sensei, sigue siendo un misterio el cómo aquel hombre pudo lograr semejante hazaña. ¿Acaso existía ya un sistema que desconocemos? La respuesta, quizás, esté escrita en el firmamente.

Aquel acero de Damasco

Otro de los materiales curiosos de antaño es el conocido como acero de Damasco. No se sabe con certeza mucho sobre él, más allá de que fue utilizado para fabricar hojas durante períodos como las Cruzadas, entre los años 1095 y 1291.

De hecho, su procedencia es incierta pese a su nombre. Vamos, que es posible que el acero de Damasco ni siquiera surgiera en la capital siria, aunque sí al menos en dicho país. Se cree que alrededor del año 900 d. C. es la primera vez que se forjó el metal distintivo, y cayó en desgracia hace relativamente poco (nada más que doscientos años atrás), aunque hoy está nuevamente recuperándose su producción.

El tanque de Da Vinci

Leonardo Da Vinci es probablemente el artista más amplio de la historia. Autor de la Mona Lisa, el retrato más sutil y matizado hasta la fecha, no solo se limitó a la pintura, sino que sus manos pasaron por un sinfín de posibilidades, entre las que también estuvo el diseño de vehículos, incluido un tanque.

Según el portal dedicado a su figura, los bocetos de vehículos blindados que elaboraba reflejaban una invención multidireccional y fuertemente armada. El tanque, en concreto, data de finales del siglo XV. En la actualidad, se ha construido un prototipo para que las personas puedan ver por sí mismas lo que el maestro tenía en mente.

Es posible que no lo veas en el campo de batalla en el corto plazo, ya que las intenciones de Da Vinci parecen haber sido más estéticas que prácticas. La idea era poner los pelos de punta al enemigo en lugar de enzarzarse seriamente en un combate.