¿Pensando en tener un conejo como mascota? Pros y contras de tenerlos en casa

Elegir un conejo como mascota, en vez de un perro o un gato, es una tendencia cada vez más extendida en nuestro país. Si estás pensando en incorporar un conejo como nueva mascota, debes conocer sus ventajas y desventajas para poder tomar la mejor decisión para tu familia y el animal, ya que tener un animal a tu cargo requiere de ciertas responsabilidades.

Los conejos son animales inteligentes y cariñosos, sobre todo si conviven desde pequeños con la familia y tienen mucho contacto con la gente. De hecho, hay un vínculo directo entre su inteligencia y su forma de demostrar el cariño ya que saben identificar a cada miembro de la familia y reconocer con quién se llevan mejor, quién les cuida y de quien deben protegerse.

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Son animales a los que les gusta jugar y que les acaricien, son bastante dóciles y si se les llama por su nombre, con el tiempo, pueden llegar a responder igual que un perro. Sin embargo, su carácter es también muy independiente y suelen tener cierto desapego hacia los humanos. A veces son algo asustadizos y pueden llegar a morder o hacer daño con sus patitas traseras al patear ¡Ten cuidado!

Tienen el tamaño perfecto

Su tamaño es perfecto para cualquier hogar y no necesitan grandes espacios para convivir con los humanos, así que si tienes una casa pequeña puede ser una muy buena opción como animal de compañía. Sus proporciones le hacen apto para los viajes en metro, avión, tren y autobús siempre que lo lleves en un transportín pequeño.

Son animales inteligentes, cariñosos y dóciles a los que les gusta jugar y que les acaricien

Además, algo muy importante que debes tener en cuenta es que padecen pocas zoonosis, es decir, enfermedades transmisibles del animal al hombre. Los conejos son unos animales muy limpios por lo que no tendrás que dedicar mucho tiempo y esfuerzo a esta tarea. Sienten fobia al agua así que prefieren limpiarse ellos mismos lamiéndose. En caso de tener que limpiarle es mejor que utilices un cepillo al agua.

Gracias a su inteligencia, pueden aprender a hacer sus necesidades en una zona concreta de su jaula, lo que agilizará la limpieza de esta y te quitará trabajo. Eso sí, si la jaula (comederos, bebederos y zona de deposiciones) no se higieniza con frecuencia puede desprenden malos olores. En este sentido, y para que esté lo más cómodo posible, lo mejor es tener un habitáculo bien acondicionado. Cuanto mayor sea la jaula, mejor calidad de vida tendrá el conejo y, por muy amplia que sea, siempre ocupará menos espacio que las camas, cuencos y areneros de perros y gatos.

Uno de los pros más ventajosos de tener un conejo en casa es que no hace falta sacarlos a la calle a correr o relacionarse, por lo que no te limitará a la hora de planear tu día a día. Sin embargo, resulta conveniente que el conejo pueda salir de la jaula un buen rato al día para que explore la casa, corra y se relacione con los humanos. De todos modos, y aunque no haga falta que los saques, los conejos sí se pueden pasear y llevar una correa para caminar por la calle al igual que los gatos.

No requiren de muchos cuidados

Otra de sus ventajas es que cuesta poco mantenerlos ya que no requieren de tantos cuidados (ni humanos, ni veterinarios) como un perro o un gato y, además, pueden vivir con recursos muy ajustados, de ahí que su demanda se haya disparado en los últimos años y sea la mascota perfecta para los niños. No obstante, también deben vacunarse, acudir pautadamente al veterinario y su pienso y premios son específicos y deberás comprarlos en tiendas especializadas. A diferencia de los perros, no necesitan seguro de responsabilidad, y sus juguetes no son muy caros ni se desgastan tanto como los de otras mascotas.

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Un inconveniente importante es que son animales nocturnos (como todos los roedores), por lo que pueden molestar por la noche, ya que son especialmente activos. Además, son algo destructivos y desordenados. Al contrario que los perros, los conejos no entienden eso de no tocar tus cosas y no romperlas. Así que cuando le sueltes por casa ten mucho cuidado con los sofás, los cables, los zapatos y el resto de tus enseres porque podrán ser mordidos por puro placer ya que sus dientes necesitan roer para limarse de forma continuada.

Asimismo, los conejos no se llevan bien con casi ningún animal. Son muy conscientes de que para perros y gatos ellos son presas, así que no querrán ver ni a un can ni a un felino, cuyo instinto natural será el de la caza, sobre todo en el caso de los gatos. En cualquier caso, si se conocen de cachorros y se acostumbran a vivir juntos, crecerán sin conflictos.

Los conejos son animales activos y nocturnos, por lo que pueden molestar por la noche

En cuanto a su esperanza de vida debes saber que es muy corta en relación con otras especies domesticas. De hecho, su vida media está entre los 6 y los 8 años, casi la mitad que un perro o un gato. En este sentido, y aunque es muy triste afrontar la pérdida de una mascota, es un animal que te permite disfrutar de una etapa de tu vida, pero no una vida entera. Por eso resulta interesante como mascota cuando tus hijos son pequeños, y cuando estos se hacen mayores y más responsables pueden pasar a tener otro tipo de mascota a su cargo.