Por qué tanta gente se autodiagnostica ahora enfermedades

Probablemente en los últimos tiempos, si das un paseo por redes sociales (o, simplemente, por los medios) te hayas percatado de cuántas personas parecen tener problemas mentales como la ansiedad o la depresión tras la pandemia. Este es un problema grave, más aún si se piensa en que afecta especialmente a los jóvenes, que comparten sus diagnósticos muchas veces en dichas redes sociales. El problema también estriba en que, a veces, palabras como "ansiedad" se han frivolizado y parece que todo el mundo sufre algo que es mucho más serio que unos nervios puntuales.

Está muy relacionado todo ello con el autodiagnóstico. Según informa 'Psychology Today', la explosión de contenido generado por usuarios en plataformas de redes sociales como TikTok e Instagram que fomenta la identificación con un trastorno está ampliamente documentada. Por ejemplo, los hashtags en TikTok en 2021 incluyen 2700 millones de visitas para el TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad), 2500 millones para el síndrome de Tourette y 1500 millones para el TID (trastorno de identidad disociativo).

En dichas grabaciones generalmente los usuarios cuentan cómo abordan el problema, identifican sus síntomas y añaden que la enfermedad les ha servido para conocerse mejor

Los médicos han informado a su vez picos en estas condiciones y otras como el trastorno obsesivo-compulsivo o el autismo. Parece que los vídeos en los que la gente cuenta sus experiencias personales con estos trastornos son muy influyentes. En dichas grabaciones generalmente los usuarios cuentan cómo abordan el problema, identifican sus síntomas y añaden que la enfermedad les ha servido para conocerse mejor. Todo esto parece hacer mella en algunas personas que lo ven, que se autodiagnostican tras leer y hacer búsquedas en Google, hablando con amigos y familiares y finalmente les llevan a convencerse de que padecen dichas afecciones, buscando como es lógico posteriormente ayuda profesional.

Esto es engañoso, claro está. Hablar de 'diagnóstico' cuando no hay un personal cualificado, es mucho decir. La confusión a este respecto puede ser una de las razones por las que las personas que se han dado a sí mismas una etiqueta de diagnóstico a menudo se enojan o cambian de médico cuando el médico no está de acuerdo. Etiquetan su experiencia (algo muy común actualmente) y surgen muchos problemas, pues, por ejemplo, el estudio epidemiológico más completo de salud mental hasta la fecha, por ejemplo, descubrió que solo en la mitad de los casos tratados de “trastorno mental” la persona diagnosticada cumplía con los criterios mínimos de diagnóstico.

En ocasiones, experiencias frustrantes o decepcionantes típicas de la angustia cotidiana se traducen en problemas mucho más graves

Los vídeos de Tiktok, además, a veces no dan diagnósticos adecuados y mezclan síntomas que no tienen que ver con determinadas afecciones. En muchas ocasiones, situaciones normales como un desempeño deficiente en el trabajo o en el colegio o experiencias frustrantes o decepcionantes típicas de la angustia cotidiana se traducen en problemas mucho más graves, cuando la apropiación personal de estas categorías tiene poco que ver con un trastorno mental.

Quizá, en lugar de autodiagnóstico, la "apropiación" personal podría ser el término más preciso para esta práctica creciente y, por supuesto, no exenta de peligro.