Batalla campal en Irlanda en una celebración nacional tras el lanzamiento de un cubo de basura

La batalla de Boyne se ha vuelto a celebrar dos años después de la pandemia en Dublín. Esta celebración irlandesa, que conmemora la victoria del ejército protestante sobre las tropas católicas, acabó en batalla campal en un barrio de la ciudad irlandesa. Un vecino del bando perdedor lanzó un cubo de basura contra una banda de música que, en ese momento, pasaba por delante de su casa.

Tal y cómo se puede ver en el vídeo subido por una vecina a Twitter, en el momento en el que la banda pasa por delante de la puerta, el joven coge un cubo de basura vacío y lo lanza con rabia contra los músicos. La reacción de estos fue fulminante y el agresor tuvo que refugiarse, a toda velocidad, dentro de casa.

Tanto los agentes de policía como los miembros de la banda se fueron a por él con intención de agredirle. Le tiraron los palos de los tambores, dieron patadas a la puerta y terminaron por intentar romper una de las ventanas golpeándola a patadas y utilizando otro cubo de basura que estaba en la entrada.

El vecino lanzó un cubo de basura

Los agentes de policía no tardaron en disolver la batalla campal. Los músicos estaban completamente enfurecidos y habrían estado dispuestos, incluso, a entrar dentro de la vivienda para vengarse del agresor. El propietario de la vivienda se encerró y no se atrevió a salir en ningún momento a dar la cara.

Los músicos reaccionaron corriendo hacia la casa para intentar responder a la agresión

Mientras tanto, en el otro de la calle, desde una casa, una vecina grababa la escena alucinando: “Dios mío, ha tirado un cubo de basura ¡Está loco!”. En el momento en el que los músicos corrieron hacia la casa, la mujer no podía creer lo que estaba viendo: “¡Están dando patadas en la ventana para colarse dentro! ¡Madre mía!”

Esta guerra en pleno corazón de Dublín y el vídeo subido a Twitter acumulan ya 245.000 ‘me gusta’, casi 30.000 ‘retuits’ y ha sido compartido como tuit citado hasta en 5.800 ocasiones. Sin duda, es una de las noticias que más están llamando la atención en Irlanda, un país que siempre ha vivido en constante tensión por las fricciones entre católicos y protestantes.