Por qué las reglas 'de siempre' funcionan en momentos de estrés

Todos tenemos estrés o ansiedad en épocas y momentos puntuales de nuestra vida, dados por determinadas causas. En esos momentos, es fundamental que nos amarremos a algo y nos sintamos seguros. El estrés, como seguro que te han dicho muchas veces, no es malo per se. Es una respuesta evolutiva que nos permite sobrevivir. Cuando nuestros antepasados se enfrentaban a un tigre, tenían que estar preparados para salir corriendo.

Hoy en día no hay tigres contra los que luchar, pero seguimos teniendo estrés. El problema es cómo lo gestionamos: cuando el organismo no se libera de estos cambios durante la fase de reconocimiento de la amenaza, se entra en un estado de estrés crónico. Y cuando una persona se siente estresado y añade todavía más estrés, los centros reguladores del cerebro tienden a hiperreaccionar ocasionando desgaste físico, crisis de llanto, hipertensión y depresión y otros problemas de salud como dolor de cabeza, artritis, asma, problemas de sueño, etc.

La regla de siempre

Una heurística es una regla que produce un buen resultado la mayor parte del tiempo, y se convierte en comportamientos automáticos que no requieren mucho esfuerzo. Pueden ayudar a reducir el autosabotaje. Un reciente artículo publicado en 'Psychology Today' pone un ejemplo: la hija de la psicóloga Alice Boyes tiene seis años y necesita beber agua para sentirse segura. No sirve preguntarle antes de salir de casa si quiere beber o preguntarle antes, "Incluso si hago estas cosas, a menudo me pregunta si he traído agua mientras estamos fuera y se pone de mal humor y se deshidrata si no lo hago". ¿Solución? Allá donde vayan lleva una hielera con un poco de agua.

Tú también tienes

Las heurísticas nos hacen sentir seguros. En primer lugar, piensa en las reglas de siempre que ya utilizas. Probablemente tengas algunas, pero no necesariamente las has etiquetado como tales. Esto te ayudará a reconocer cómo, con el tiempo, estas reglas se vuelven comportamientos automáticos, casi inconscientes y ya no requieren mucho esfuerzo. Así es como sabes cuando un comportamiento ha alcanzado el nivel de ser un hábito.

Con el tiempo, estas reglas se vuelven comportamientos automáticos, casi inconscientes y ya no requieren mucho esfuerzo

A continuación, observa tus patrones a medida que avanzas en tu vida. Busca cómo las reglas simples y específicas podrían ayudar a que tu vida sea más fluida y ayudar con tu autorregulación, crianza de los hijos, trabajo o relaciones. Las heurísticas útiles pueden ayudarte a reducir el autosabotaje. Asegúrate de que las reglas sean lo suficientemente específicas. No elijas nada con lo que no estés seguro de poder seguir el ritmo