¿Cuál es el secreto para vivir 128 años? Esta mujer lo revela

La mayoría de los seres humanos sueñan con tener una vida larga y sana que se prolongue durante los máximos años posibles. Con el avance de la ciencia ahora parece más sencillo subsistir más tiempo, pero, aun así, parece casi imposible alcanzar la edad de esta mujer sudafricana que ya ha cumplido los 128 años. La mujer nació en el año 1894 y todavía se vale por sí misma realizando varias tareas del hogar sin aparente problema.

Johanna ha cumplido los 128 años rodeada de varios familiares. Y es que, esta señora natural de Sudáfrica puede presumir de tener 50 nietos y bisnietos. Desde su nacimiento, ha vivido dos cambios de siglo, ha superado hasta dos guerras y ha visto el final del colonialismo británico en su tierra. La clave para vivir tantos años radica en una dieta especial que ella misma ha desvelado.

Así, esta mujer, que creció en una granja de la ciudad de Ottosdal, confirma que se ha alimentado a base de espinacas silvestres y leche fresca casi toda la vida. Durante todos esos años, Johanna disfrutó de una vida sencilla que ahora le gustaría recuperar.

Johanna y su dieta milagrosa

Actualmente, esta señora que cuenta ya con más de un siglo de vida vive actualmente en la ciudad de Jouberton y allí ha contado algunas anécdotas de su infancia: “Tuvimos una plaga de langostas en la granja que nos hizo temer que perdiéramos toda la cosecha, pero le encontramos una solución. Logramos atrapar a estos insectos y comérnoslos. Era como si comiéramos carne”.

Esta mujer ha sobrevivido a dos guerras, ha cambiado dos veces de siglo y tiene 50 nietos

Varios medios locales se han hecho eco de la fiesta de cumpleaños de esta mujer que ya ha alcanzado los 128 años de vida. Johanna tiene problemas de audición, pero, pese a todo, se sigue desenvolviendo en el día a día con aparente normalidad. Su longevidad no le hace perder las ganas de vivir.

Sus familiares están luchando para que Johanna aparezca en el Libro Guiness de los Récords. Ante un futuro fallecimiento, esta mujer sudafricana afirma que “tendrán que sacrificar una vaca cuándo yo me muera y tendrán que enterrarme bien para que no les moleste”. Sin duda, Johanna es un ejemplo de vitalidad y longevidad.