Entre el bulo y la necesidad: la cantidad de agua que debemos tomar cada día

El 75% de nuestros cuerpos es pura agua, así que no es de extrañar que esta sea entendida como un asunto fundamental, en todos los sentidos. Llegada esta época del año en que las temperaturas empiezan a subir, las recomendaciones sobre la necesidad que tiene el ser humano de hidratarse de manera adecuada crecen a la par. Sin embargo, nunca parece del todo clara la cantidad de agua que debemos tomar al día, según los expertos, para mantener nuestro organismo lo suficientemente hidratado. Esto es, ¿un litro? ¿Dos libros? ¿Cuántos vasos en concreto?

Varios bulos corren en las redes a este respecto. El más interiorizado por la población es el que sostiene que para la Organización Mundial de la Salud (OMS) la cantidad diaria recomendable es de entre 1'5 y 2 litros. No es así. El organismo internacional suele hablar del "consumo de agua domiciliaria", poniendo su énfasis en la salubridad y la disposición que cada persona tiene para una buena higiene.

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No obstante, las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de Estados Unidos han respondido recientemente a esta pregunta con cifras específicas, aunque haciendo ciertas distinciones.

Una cantidad aproximada

Para empezar, la cantidad que debe consumir un hombre y una mujer no son las mismas, debido a la composición específica de cada cuerpo. Aunque también tiene mucho que ver el nivel medio de actividad que se realiza. Así, según la institución, las mujeres deben consumir una media de 2'7 litros, o lo que es lo mismo: 11'5 tazas de agua al día.

Por su parte, los hombres deberían consumir 3'7 litros, es decir, 15'5 tazas de agua al día. Eso sí, se trata siempre de una cifra aproximada para valores que hablan de masas sociales, ten en cuenta que puede que algunas personas necesiten menos cantidad o más, dependiendo de cada variable.

De la misma forma, no tiene por qué tratarse de agua en su estado más específico, sino de un compendio que signifique hidratación, y este incluye todos los alimentos formados por agua, desde frutas hasta verduras.

Síntomas de deshidratación

La espinaca, el tomate, la naranja y la manzana, entre otras frutas y verduras, son ricas en agua. Pero además, hay un sinfín de variedades para permanecer hidratados sin necesidad de tomárnoslas crudas. Desde caldos, cremas a batidos e infusiones, hay todo tipo de posibilidades para cada momento del día.

No olvides que algunos de los síntomas más comunes de no estar bien hidratado son la fatiga, la confusión e incluso los calambres o pinchazos. Se trata de síntomas que podemos padecer en tras haber realizado tareas pesadas, después de hacer ejercicio o debido a una exposición solar prolongada sin protección.

Un truco para saber el estado de hidratación de nuestro cuerpo es observarnos la piel: debemos pellizcarnos en la frente, entre el pulgar y el dedo índice o en el dorso de la mano. Si nos pellizcamos estas zonas y el color de la piel tarda más en volver a su estado habitual, significará que necesitamos hidratarnos más.