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Las tres nuevas reglas para triunfar en una entrevista de trabajo por videollamada
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Las tres nuevas reglas para triunfar en una entrevista de trabajo por videollamada

Las fórmulas laborales han cambiado y también las de contratación: aquí van una serie de detalles a tener en cuenta si quieres ser el candidato escogido

Foto: Foto: iStock.
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Cuando te vas a presentar a una entrevista, todos los consejos habidos y por haber suenan a cliché: causar buena impresión, usar un lenguaje no verbal adecuado, dar una sensación de seriedad y profesionalidad, demostrar agilidad mental a la hora de responder a las preguntas, garantizar de que cumples todos los requisitos para el puesto y demostrar, ante todo, que eres la persona indicada que estaban buscando. Y, sobre todo, llegar con bastante tiempo de sobra, pues si llegas tarde el proceso puede acabar para ti antes de comenzar.

Pero después de que el coronavirus llegara a nuestras vidas, muchas de las entrevistas de trabajo se realizan por videollamada, lo cual ha cambiado ciertas reglas del juego. Muchas empresas buscan a empleados remotos, con lo cual las exigencias y requisitos ya no son los mismos que para un trabajo presencial. Tampoco funciona tu impresión física, pues ya no tienes justo delante a tu empleador o técnico de recursos humanos. Esto puede parecer una ventaja si te pone más nervioso de lo normal o eres un poco tímido, pero también esconde muchas desventajas.

Las bromas generan confianza y cercanía, pero no te pases; los detalles graciosos en ocasiones pueden ser un campo de minas

En primer lugar, puede ser algo positivo el hecho de que no vas a tener que desplazarte para la entrevista y afrontarás esta misma desde la comodidad de tu hogar. Esto hace que la probabilidad de llegar tarde se reduzca muchísimo. ¿Quién puede demorarse a la hora de sentarse en el escritorio de su cuarto y encender el ordenador? Por otro lado, ya no tienes que permanecer en un espacio físico que desconoces y que te puede hacer sentir inquieto: estás resguardado en tu intimidad, por lo que la sensación de confianza en ti mismo debería ser mayor.

Mayor facilidad para desestresarse

Por esto mismo, conviene aprovechar los minutos previos a la entrevista. ¿Qué tal un poco de ejercicio para desestresar los músculos? ¿O la canción que más te motiva a la hora de enfrentarte a un reto? Esto es lo que aconseja Nancy Duarte, experta en contratación laboral y entrevistas de trabajo, en un artículo de la revista 'Fast & Company': "llénate de energía y convierte cualquier signo de nervios en emoción".

Foto: File photo: spacex owner and tesla ceo elon musk listens during a conversation with legendary game designer todd howard at the e3 gaming convention in los angeles

El estrés que puede generar una videollamada no se puede menospreciar. Esos silencios que aparecen entre frase y frase son más frecuentes que en una charla frente a frente, aunque sea paradójico. Cuando dos personas se encuentran, tienden a esquivar los silencios de forma eficaz en mayor o menor medida, pero en la videollamada dependes de la calidad de conexión de tu ordenador, lo que puede producir ciertas confusiones en cuanto a los tiempos de espera entre preguntas y respuestas.

Genera un espíritu de cercanía

Ante esta tesitura, lo mejor, como en el encuentro físico, es hacer que la otra persona se sienta cómoda y sonría. Puedes soltar alguna broma no muy arriesgada, tal vez sobre un tema menor como puede ser el tiempo o lo que te gusta hacer en tu tiempo libre. Todo con tal de que el otro aprecie la humanidad que hay en ti y que no puede llegar a percibir del todo al estar al otro lado de una fría pantalla. Las bromas, además, generan confianza y cercanía, sin duda un valor muy preciado a destacar para un puesto de trabajo. Eso sí: como decíamos, no te pases, los detalles graciosos en ocasiones pueden ser un campo de minas y causar buen rollo de manera impostada puede salir muy mal.

Haz preguntas sobre la cultura de la empresa

Hay una diferencia sustancial entre una entrevista por videollamada y presencial: cuando acudes en persona tienes pistas sobre cómo es la empresa en la que quieres entrar y te puedes hacer una idea de los ritmos de trabajo o los hipotéticos compañeros que tendrías en un futuro. En cambio, si es por videollamada, la persona que tienes al otro lado es la única referencia visual y sensitiva que obtienes. Por ello, debes preguntar cómo trabajan, cuáles son sus ideas y valores, los horarios (evidentemente), la flexibilidad o la fórmula para conciliar la vida laboral de la personal... todo cuenta.

A pesar de que eres tú quién debes venderte, no por ello debes mostrarte completamente desinteresado en la historia y cultura de la empresa. En caso contrario, sería un punto negativo solo hablar de ti, pues denota que tienes mucha inseguridad por demostrar que realmente eres el candidato ideal. Tienes que demostrar que conoces al pie de la letra los códigos del trabajo al que te presentas porque o bien has trabajado en el mismo sector o te has estado preparando mucho para ello.

Foto: Atraer a los mejores candidatos es el objetivo de las empresas (EFE/Emiio Naranjo)

Como conclusión, lo que al principio puede parecer intimidante al ser algo nuevo, a medida que irás haciendo más entrevistas así y acostumbrándote al formato adquirirás más confianza. Todo lo que debes hacer es conseguir relajarte de la mejor forma posible con anterioridad y aprovechando que estás en tu espacio personal, sacar energía, causar buena impresión con pequeñas bromas o preguntas para sembrar confianza y, sobre todo, transmitir cercanía y que de verdad te mueres de ganas por formar parte del proyecto.

Cuando te vas a presentar a una entrevista, todos los consejos habidos y por haber suenan a cliché: causar buena impresión, usar un lenguaje no verbal adecuado, dar una sensación de seriedad y profesionalidad, demostrar agilidad mental a la hora de responder a las preguntas, garantizar de que cumples todos los requisitos para el puesto y demostrar, ante todo, que eres la persona indicada que estaban buscando. Y, sobre todo, llegar con bastante tiempo de sobra, pues si llegas tarde el proceso puede acabar para ti antes de comenzar.

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