Cómo incorporar el pan en nuestra dieta si estamos intentando adelgazar

Debido a la buena acogida que están teniendo actualmente las dietas bajas en carbohidratos, parece que tomar pan supone un pecado capital. Son muchos los especialistas que indican que hay maneras de consumir este alimento sin que ello afecte a nuestra salud. De hecho, la ingesta de pan puede aportar beneficios a la hora de adelgazar y perder peso.

“El pan sacia nuestro apetito, sobre todo cuando lo tomamos tostado. No hay nada como hundir los dientes en pan de molde tostado cuya masa sea integral o fermentada”, ha contado a Eat This Frances Largeman-Roth, experta en nutrición y autora de 'Batidos y zumos: cocina curativa de prevención'.

Opinión

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“Si has estado evitando el consumo de carbohidratos a la hora de perder peso, es habitual que el cerebro emita señales que significan que anhela esos alimentos. Es mejor incluir de forma consciente carbohidratos en tus comidas para aumentar la satisfacción y el neurotransmisor de la serotonina para sentirte bien”, ha proseguido.

Más saciante y de lenta digestión

Lo más importante es qué tipo de pan consumes. Como ha indicado la especialista, el primer beneficio de comer este alimento es que mantiene el estómago lleno durante más tiempo. Para la estudiante de doctorado Lisa Young, el pan no es un producto que haga que nuestro peso aumente: “Elegir pan con un alto contenido de fibra y cereales integrales es más saciante y su digestión requiere un proceso más largo. Esto hace que el estómago se sienta lleno durante más tiempo, lo que implica menos antojos y un tracto gastrointestinal más saludable”.

El segundo beneficio que aporta el consumo de pan para adelgazar y perder peso está muy relacionado con el primero: Aporta nutrientes como la fibra. La también estudiante de doctorado Jinan Banna ha afirmado que la fibra ayuda a que nos sintamos llenos con el consumo de “muy pocas calorías. Una cantidad suficiente de fibra es una parte muy importante de una dieta para bajar peso”.

La Asociación Estadounidense del Corazón señala que el individuo debe consumir como mínimo entre 25 y 30 gramos de fibra al día para tener un estado de salud óptimo. Sin embargo, los norteamericanos suelen consumir un promedio de entre 10 y 15 gramos. Con un incremento del consumo nos sentiremos llenos y veremos cómo mejora nuestra salud intestinal general.

Regula tu azúcar en sangre

“Comer panes que sean 100% trigo integral o granos integrales supone que están hechos con harina. En términos científicos, implica que el salvado y el germen permanecen intactos”, ha informado Amy Goodson, autora de 'The Sports Nutrition Book'. Al consumir una harina rica en fibra, regularemos el azúcar en sangre, lo que reduciría el riesgo de enfermedades cardíacas y ayudaría a controlar el peso.

Por último, Trista Best, de la empresa de sumplementos Balance One Supplements, ha subrayado que el pan integral ayuda a incluir en nuestra dieta alimentos nutritivos y abundantes que no consumiríamos sin él. El aguacate y los huevos son dos de las combinaciones que ha recomendado. Las rodajas de plátano son otra sugerencia.

Algo que parece muy evidente pero que resulta difícil es distinguir a simple vista el pan que compramos. Es importante no dejarse engañar por las etiquetas. De hecho, algunos productos afirman contener 'cereales integrales' y, sin embargo, la etiqueta demuestra lo contrario: “Evite uno con muchos conservantes y azúcares. Elija el que tenga granos germinados en caso de que lo encuentres”.

Evita comprar pan que lleve en su composición muchos conservantes y azúcares

En definitiva, ninguna dieta exige la eliminación total de un producto. De hecho, son muchos los médicos y nutricionistas que recomiendan ingerir nuestro plato favorito, sea o no sano, de forma moderada. Al parecer, hay un alto porcentaje de abandono de la dieta si solo incluye alimentos que no nos agradan. El pan es un producto que deberíamos tener cuenta en cualquier rutina, si bien será fundamental consumir el que sí aporta beneficios a nuestra salud.