La fuga más surrealista de una cárcel argentina: huyeron en carritos con sus novias
Las parejas de los reclusos les visitaron como cualquier otro día, pero nadie revisó sus pertenencias cuando se marchaban de la prisión con sus novios dentro de unos carritos
Argentina no sale de su asombro después de la fuga protagonizada por dos presos en la prisión de Piñero, en la ciudad norteña de Santa Fe. La cárcel, considerada de máxima seguridad, se enfrenta ahora a las miradas de los argentinos, que no se explican que dos delincuentes peligrosos, que ya habían protagonizado otra fuga anteriormente, pudieran escapar fácilmente.
Los hechos sucedieron el pasado 17 de mayo, pero es ahora cuando se ha conocido todo lo sucedido. Ese día, dos reclusos identificados como Hugo Peralta y Carlos D'Angelo recibieron sendas visitas de familiares. Sin embargo, cuando se produjo el conteo de presos por la noche, ya no estaban en la prisión: habían huido.
Las cámaras de videovigilancia de la unidad penitenciaria número 11 captaron el momento en el que los hombres huyeron. Supuestamente, utilizaron dos carritos que se da prestan a las visitas para que introduzcan topa o comida a sus seres queridos. Sin embargo, cuando se marcharon del recinto carcelario, nadie vigiló que esos carritos estuvieran vacíos.
Escándalo nacional
Los vídeos han provocado la indignación de los argentinos, que piden explicaciones a los responsables de la cárcel. Lo mejor de todo es que, una vez fuera de la cárcel, otra cámara grabó a los dos fugados subiéndose tranquilamente a un vehículo que les esperaba en el exterior, para marcharse a continuación sin ningún obstáculo.
Los dos fugados ya habían tratado de escapar en 2019 durante un traslado penitenciario
El subsecretario de Asuntos Penitenciarios de Santa Fe, Jorge Bortolozzi, ha reconocido a la agencia Telam sentirse "consternado y avergonzado por el bajo nivel de conocimiento y de contracción al trabajo". Y añade que "es imposible fugarse salvo que se haga la vista gorda, haya connivencia y mala praxis".
De momento, la justicia ya ha ordenado la detención de la pareja de D'Angelo, Johana Ayelén, una de las personas que había visitado a su pareja el día de la fuga, como presunta colaboradora.
Carlos D'Angelo estaba condenado a 23 años de cárcel por el asesinato de un comerciante en el año 2014 y no es la primera vez que protagoniza una fuga: en 2019 trató de escapar, también junto a Hugo Peralta, durante un traslado penitenciario.
Argentina no sale de su asombro después de la fuga protagonizada por dos presos en la prisión de Piñero, en la ciudad norteña de Santa Fe. La cárcel, considerada de máxima seguridad, se enfrenta ahora a las miradas de los argentinos, que no se explican que dos delincuentes peligrosos, que ya habían protagonizado otra fuga anteriormente, pudieran escapar fácilmente.
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