La lucha de Ángel Pérez contra su tetraplejia: el joven gallego que necesita 100.000 euros para tratarse en EEUU

Ángel Pérez, padre de dos niños pequeños, solo tenía 32 años cuando se quedó tetrapléjico. El 24 de mayo de 2020 se presentaba como un día de diversión con amigos después del confinamiento, pero se convirtió en su peor pesadilla. Una mala caída en una piscina le luxó el cuello y le causó una lesión medular C4-C5 que le dejó paralizado de cuello para abajo.

El ourensano siempre ha sido una persona muy activa, especialmente vinculado al fútbol, llegando a jugar 18 años en la UD Barbadás. Actualmente su rehabilitación y posibilidades de recuperar algo de movilidad están muy limitadas en nuestro país, por lo que está tratando de recaudar 100.000 euros a través de un crowdfunding para poder tratarse en Estados Unidos.

La familia, de la mano de la fisioterapeuta que trata a Ángel en Coruña, se ha puesto en contacto con varias clínicas estadounidenses para iniciar una terapia con células madre. Stem Cell Therapy de Las Vegas, Stem Cell Therapy Montclair (Nueva Jersey) o Rejuv Medical (Minnesota) son algunos de los centros a los que han enviado los informes de su estado para conocer cuál sería la opción más recomendable para un tratamiento celular que, en cualquier caso, sería experimental. Del mismo modo, esperan encontrar en Estados Unidos un lugar especializado en el que realizar una rehabilitación intensiva.

“A día de hoy no existe una cura para la lesión que él tiene. Sin embargo el tratamiento con células madre se ve como algo muy prometedor, pero en España no existe como tal”, explica a El Confidencial su fisioterapeuta Belén López. “Es cierto que con este tratamiento no es posible recuperar la vida anterior como tal, pero sí experimentar una mejoría en la movilidad y la sensibilidad, entre otros. La idea es recuperar la independencia que tenía antes, en la medida de lo posible”, señala.

“No solo se trata de este tratamiento, también tiene que hacer una rehabilitación intensiva y especifica, que aquí en España tampoco se hace”, añade la especialista de la clínica NeuroStep.

La fisioterapeuta se muestra esperanzada con el tratamiento celular experimental, ya que tiene contacto con pacientes con lesiones similares que se han sometido en América a este tipo de terapias: “Estuve un tiempo trabajando fuera España y mantengo el contacto con pacientes que no son de aquí. Me reportan ellos mismos que notan una mejoría con relativa rapidez; aunque no están como antes de la lesión y tienen que seguir trabajando duro”.

Por su parte, la mujer de Ángel, Pamela Trujillo, hace hincapié en el mismo mensaje: “Lo que estamos buscando en Estado Unidos no es una cura, porque por el momento no existe”. “Lo que Ángel busca es una mejor calidad de vida. Actualmente depende de una persona para hacerlo todo, porque no se mueve de hombros para abajo. Pero espera que estos tratamientos le permitan una recuperación con la que pueda, por ejemplo, mover los brazos; lo que le permitiría ganar algo de independencia y, sobre todo, valerse por sí mismo”, cuenta emocionada.

La cantidad de 100.000 euros, que esperan recaudar, es un cálculo estimativo. En principio, con este dinero podrían costear la terapia celular experimental, la rehabilitación intensiva y los costes de la estancia que se alargaría más de medio año.

Un año especialmente complicado

El último año ha sido muy difícil para Ángel y los suyos. Tres semanas después del accidente nació su segundo hijo, al que no pudo conocer hasta tiempo después.

Además, por culpa de la pandemia durante los seis meses que permaneció en el hospital tampoco pudo ver a sus familiares ni amigos.