Recupera una cartera perdida hace 53 años en la Antártida

Paul Grisham nació en el la desértica Arizona en 1948. Se alistó en la Marina y se formó como técnico del tiempo. En octubre de 1967 fue llevado "a regañadientes" a la fría Antártida, como parte de la denominada operación Deep Freeze. Estuvo 13 meses, en los que su único ocio era tomarse un Martini al acabar el día y llamar a su esposa una vez a la semana, según el relato que recoge 'Infobae'. Regresó y no solo dejó parte de su vida en la estación ártica: también su cartera.

En 2014, cuando desmantelaron la base McMurdo en la isla de Ross, apareció tras unas taquillas una vieja billetera. Su contenido era asombroso: además de la identificación de la Marina, la licencia de conducir y varios giros postales, encontraron instrucciones sobre cómo actuar durante ataques atómicos, biológicos y químicos y una tarjeta perforada de racionamiento de cerveza. Con estos documentos podemos imaginar qué dura era la vida durante la Guerra Fría en la aún más gélida Antártida.

La ONG Indiana Spirit of’45 ha estado meses intentando localizar a Grisham. Toda una labor de detectives, aseguran. Ya habían logrado mandar otros objetos extraviados a otros investigadores y la historia se hizo viral en redes sociales. Así, después de varios 'mails', mensajes en Facebook y distintas cartas lograron identificar al propietario.

Grishman recibió la billetera hace apenas unos días en su casa de San Diego. Tiene 91 años de edad. Ya no recordaba que había perdido la cartera en la Antártida. Se había retirado de la Marina en 1977 y vivió en Monterey, California, hasta la muerte de su esposa Wilma en el año 2000. Posteriormente, se volvió a casar y se trasladó a San Diego.