Un colegio francés pide a los padres que no lancen a sus hijos por encima de la verja

Aparcar en doble fila, grupos insistentes de whastapp... y ahora lanzamiento de niños. "Yo no tiro a mis hijos por la puerta. Cuando llego tarde, vuelvo a las 10 a.m. o a las 3 p.m". Con ese explícito recordatorio, acompañado de un simpático dibujo, el colegio Trillades, en la ciudad francesa de Avignon, quiere evitar una práctica que ya se ha hecho común entre los padres a los que se les ha hecho tarde: tirar al niño dentro del colegio.

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No es que los padres vayan apurados y lancen de manera figurada a los pequeños en la escuela: realmente los arrojan. Cuando la verja de entrada está ya echada, empujan a los niños por arriba, como si fuera un partido de voley. ¡Y mide dos metros de altura!

La directora de la escuela, Sanaa Meziane, ha declarado a The Times que “los padres que llegan después de que suene el timbre tiran a sus hijos, literalmente”. El suceso no ha sido algo puntual y, como es realmente grave, han decidido poner los carteles y dejarlos como recordatorio.

Con el covid-19 los colegios tuvieron que reestructurar sus entradas y sus salidas. Se crearon franjas horarias estrictas para que no se amontonaran niños y padres a las puertas de los establecimientos. En las últimas semanas Francia ha tenido que controlar aún más las escuelas debido a la amenaza terrorista.