Los perros, como las personas, también sufren la crisis de la mediana edad

A lo largo de la vida, nuestra personalidad cambia. No se trata de un cambio brusco, pero si echamos la vista atrás, comprobaremos que nuestra perspectiva de la vida y nuestras opiniones se han modificado.

Uno de esos períodos, uno de los más marcados, es la llamada crisis de la mediana edad. En ella, tras haber pasado ya la juventudy entrar en la madurez e ir envejeciendo, las personas comienzan a cuestionarse cosas de su vida pasada y cómo enfocar el futuro.

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Pues resulta que los perros experimentan cambios similares en su personalidad, aunque en un período de tiempo mucho más corto que el de los humanos.

Cambio de percepción del mundo

En un nuevo estudio, publicado en la revista científica 'Scientific Reports', un grupo de investigadores europeos revela que los perros tienden a experimentar un cambio en su percepción del mundo en un momento relativamente predecible de sus vidas y ese cambio hace que estén menos interesados en nuevas experiencias y, en cierto modo, más hastiados.

Los perros tienden a estar menos interesados en las cosas nuevas después de los tres años de edad

Los investigadores realizaron un experimento para rastrear las personalidades caninas de más de 200 perros de la misma raza. El equipo eligió a los Border collies, que son reconocidos por su increíblemente inteligencia, y sus edades oscilaban entre menos de un año y 15 años.

El estudio examinó el interés de los perros en nuevas experiencias y entornos, introduciéndolos en habitaciones con las que no estaban familiarizados. Los científicos llevaron a cabo una serie de pruebas con los perros, rastreando diversos comportamientos como la disposición de los perros a explorar su nuevo entorno, cómo saludaban a alguien desconocido para ellos, cómo lidiaban con la separación y el aislamiento, cómo de obedientes eran y cómo reaccionaban ante gestos amenazantes.

El equipo, cuatro años después, llevó a cabo una investigación de seguimiento de las pruebas iniciales para ver cómo la personalidad de los perros podía haber cambiado durante ese período de tiempo.

Según publica BGR, los investigadores pudieron identificar una serie de peculiaridades interesantes en la personalidad canina, pero uno de los hallazgos más importantes fue que los perros tienden a estar menos interesados en las cosas nuevas después de los tres años.

A partir de los 6 años, estables

Este cambio era predecible, incluso en los animales que aún no habían alcanzado esa edad, y las pruebas de seguimiento confirmaron el cambio más o menos al mismo tiempo en la vida de cada perro.

Lo que también descubrieron es que para cuando un perro alcanza la edad de seis años, es mucho menos probable que su personalidad cambie drásticamente en el futuro, manteniéndola estable por el resto de sus vidas.