Cinco trucos para mentalizarte y perder peso de la forma más rápida y efectiva

Comer más verduras, reducir la cantidad y salir a hacer ejercicio con regularidad. Cuando se trata de perder peso, probablemente te sepas ya toda la teoría. Pero a la hora de ponerlo en práctica, lo más importante acaba siendo desarrollar una fuerza de voluntad de hierro para no fallar a la primera de cambio. Y para ello es necesario mentalizarte bien de tus objetivos y conocer a la perfección los pasos que debes dar.

"Ingerir alimentos saludables, beber mucha agua, hacer el suficiente ejercicio y dormir: eso es lo fácil", asegura Autumn Calabrese, 'coach' norteamericana para la pérdida de peso, en la revista 'Eat This Not That'. "Entonces, ¿por qué se nos hace tan difícil? Esto se debe a que estamos continuamente luchando contra nuestra mente y emociones, las cuales son muy poderosas. Las experiencias negativas que has soportado ahí durante toda tu vida están para ayudarte a convertirte en la persona que quieres ser. ¿Te llenan de dudas, odio o autosabotaje o te convierten en un guerrero?"

Yo no me privo, pero tampoco me excedo. En eso básicamente consiste la disciplina

Para Calabrese, el apartado mental es esencial en todo programa de adelgazamiento para que este resulte efectivo. En este sentido, lo primero que enseña a todos sus clientes es conectar con uno mismo y llenarse de autoestima. Solo así se podrá conseguir esa ansiada bajada de peso. Recientemente, la entrenadora ha compartido lo que ella llama los 'cambios de la actitud otoñal' para impulsar a las personas con las que trabaja a llevar a buen puerto sus propósitos de pérdida de peso, que veremos a continuación.

Reconocer que no será fácil

Seguramente muchos, para autoconvencerse a sí mismos, repitan una y otra vez en su cabeza que el reto es fácil de conseguir. Pero lo importante es justo lo contrario: reconocer la magnitud del cambio al que te enfrentas. Tampoco hay que ponerse metas muy altas, pero sí reconocer que el camino no va a ser 'pan comido'. "Elige practicar el autocuidado, hacer ejercicio y comer bien", recomienda Calabrese. "Cuando tomas la decisión de implementar estos cambios, todas las dificultades desaparecerán. Te sentirás fuerte, orgulloso y seguro de quién eres".

No siempre vas a estar motivado

La motivación, necesaria para llevar a buen puerto tus objetivos de adelgazamiento, por desgracia suele desaparecer más pronto que tarde. Pero si consigues desarrollar un sentido de disciplina, podrás salir victorioso de los típicos bajones de ánimo que suelen aparecer nada más comenzar la dieta o la rutina de ejercicios. Para la entrenadora personal, la clave reside en no privarse de aquellos caprichos que nos hacen felices, pero lógicamente, no abusar de ellos. "Yo no me privo, pero tampoco me excedo", asegura. "En eso consiste la disciplina".

Piensa en que eres todo lo que comes

Por un momento, date cuenta de que cada trozo de comida que ingieres va a estar dentro de ti en las próximas horas. Por tanto, si de verdad estás practicando el autocuidado y lo primero que piensas es en tu salud, sé muy consciente de todo lo que te llevas a la boca. En definitiva, se trata de comprender el alcance que tiene comer sano y los efectos en tu cuerpo. Lo mejor, en este sentido, es preparar tu comida por ti mismo para que así seas consciente de lo que ingieres. Y, en cierto modo, aprender a valorar más la comida sana, tanto por su sabor como por sus ventajas a la hora de perder peso.

Ten presente la posibilidad del fracaso

Aunque los objetivos están para cumplirlos, nadie es perfecto y posiblemente una de las principales razones que te paralicen sea el miedo al fracaso. Básicamente, porque seguramente ya lo has intentado varias veces con idéntico resultado. En ese caso, Calabrese asegura que lo más importante es saber levantarse para volver a intentarlo una vez más. Como en cualquier otra circunstancia vital, no importa el número de ocasiones en las que perdiste una oportunidad, sino la velocidad a la que te recuperas de esa desilusión para volver con más ganas si cabe.

El éxito está en el progreso, no en la perfección

Otra de las concepciones erróneas que atenazan la mente de aquel que busca perder peso es la idea de perfección. No se trata de alcanzar un objetivo fijo, sino que este debe ser cambiante de acuerdo a nuestras circunstancias y energía. No apuntes a la perfección, porque desgraciadamente (o afortunadamente), esta no existe. Cuando te metes en un régimen de alimentación para la pérdida de peso, la meta no consiste en adelgazar mucho en poco tiempo, sino saber adoptar esta serie de buenos hábitos propios de una vida saludable en tu día a día. No te frustres si no consigues lo que buscas, piensa en los avances que haces a diario, por pequeños que sean, y que te algún día te serán recompensados.