Es noticia
El cepillo de la Iglesia se reinventa para poder hacer frente al coronavirus
  1. Alma, Corazón, Vida
LA TECNOLOGÍA AL SERVICIO DE LOS POBRES

El cepillo de la Iglesia se reinventa para poder hacer frente al coronavirus

Una iglesia católica de Haití pide limosna entre sus fieles utilizando un coche teledirigido para llevar el cepillo y poder mantener así las distancias de seguridad entre los fieles

Foto: El cepillo se acerca a cada persona colocado en lo alto de un coche por control remoto (Foto: Tik Tok)
El cepillo se acerca a cada persona colocado en lo alto de un coche por control remoto (Foto: Tik Tok)

El coronavirus dejó, durante varios meses, calles desiertas en todo el mundo. La mayoría de las tiendas cerraron, las personas tuvieron que quedarse confinadas en sus casas y la actividad se detuvo. Una situación que también afectó a las iglesias, que tuvieron que cerrar sus puertas sin permitir que los fieles pudieran acudir a los actos litúrgicos con normalidad.

Con la desescalada, los templos volvieron a abrir, aunque lo hacen con importantes medidas de seguridad. El lavado de manos a la entrada es obligatorio y los lugares que ocuparán los feligreses dentro de la mayoría de las iglesias está ya establecido, con marcas en los bancos para cumplir con la distancia de seguridad.

Sin embargo, las nuevas restricciones que rigen los actos religiosos han afectado a algo tan tradicional como el paso del cepillo para que los fieles depositen sus limosnas. Una acción vital para el sostenimiento de muchas parroquias, que han tenido que reinventarse para poder seguir recogiendo el dinero de los feligreses… sin perder la distancia de seguridad.

Tecnología para las limosnas

En Haití, una iglesia católica ha decidido pasar el cepillo subido a un coche teledirigido de tal manera que pueda moverse libremente por el templo sin necesidad de acercamiento entre personas. Una situación que no pasó desapercibida para un usuario de Tik Tok, que grabó el vídeo y lo subió a las redes sociales, donde ha tenido un gran éxito.

Los responsables del templo buscaron una solución ingeniosa para guardar la distancia de seguridad y seguir recogiendo las limosnas de los fieles

El cepillo móvil no es la única innovación que hemos visto en las últimas semanas en diferentes centros religiosos de todo el mundo. De hecho, un sacerdote norteamericano saltó a la fama el pasado mes de mayo en Michigan por utilizar una pistola de juguete para rociar los coches de los fieles con agua bendita, ante la imposibilidad de hacerlo en persona.

La pandemia ha hecho que todos los sectores tengan que utilizar la imaginación para sobreponerse a las adversidades y la religión no iba a ser menos. Lo importante es mantener las distancias de seguridad entre las personas para evitar que el virus se propague y tener que volver a un confinamiento que nadie desea.

El coronavirus dejó, durante varios meses, calles desiertas en todo el mundo. La mayoría de las tiendas cerraron, las personas tuvieron que quedarse confinadas en sus casas y la actividad se detuvo. Una situación que también afectó a las iglesias, que tuvieron que cerrar sus puertas sin permitir que los fieles pudieran acudir a los actos litúrgicos con normalidad.

Tecnología Iglesia
El redactor recomienda