¿Tu perro duerme en la cama contigo? Estas son las ventajas y los inconvenientes
Muchos dueños comparten las sábanas con su mascota canina y otros tantos se preguntan si esto es en verdad buena idea: una serie de expertos veterinarios nos sacan de dudas
Son tan adorables y demandan tantos cariños que resulta casi imposible decirles que no cuando llega la hora de irse a dormir y quieren subirse a la cama contigo. La compañía que proporcionan los perros y su infinita ternura para con sus dueños hacen que resulte que un lujo que duerman a tu lado, guardando tu descanso. Aunque por otro lado, muchos expertos y veterinarios condenan esta costumbre.
Una encuesta internacional desveló que el 50% de los dueños de perros asegura que casi siempre o siempre duerme con ellos. Por todo ello, ¿es un buen hábito que el can descanse a tu lado? ¿Qué debemos hacer en caso de dudas? La revista 'Pop Sugar' ha hablado con varios expertos para abrir el debate y que den sus impresiones sobre esta práctica que seguramente sea milenaria.
La cercanía que sentimos con nuestras mascotas puede reducir la presión arterial y ayudarnos con el estrés y la depresión
Leslie Brooks, asesora veterinaria, por ejemplo, cree que no hay una decisión correcta o incorrecta a la disyuntiva de permitir o no que tu mascota duerma en la cama. "Realmente, depende del estilo de vida y las preferencias del dueño de la mascota, incluido su entorno doméstico y la dinámica familiar", asegura "No tiene nada de malo dejar que tu perro duerma en tu cama en lugar de echarle y que lo haga en su propia área asignada para dormir".
Al fin y al cabo, la decisión final es tuya. "Lo que debes tener en cuenta son tus preferencias y las de tu mascota, así como de terceras personas que vivan con vosotros", recalca Gabby Pagana, médica veterinaria. Algunos expertos coinciden en que primero se deben evaluar los hábitos del sueño de ambos, la higiene, las condiciones médicas o el temperamento de los canes, así como su personalidad.
Sin ir más lejos, el hecho de que ronquen o no. Otras preguntas que debes hacerte es si hay espacio real para los dos, ya que en muchas ocasiones los perros tienden a estirarse y a colonizar silenciosamente el espacio. A más de uno le habrá pasado que se ha despertado en el borde de la cama y el perro, justo a su lado, completamente dormido 'a cuerpo de rey'.
Los pros
Está demostrado que tener una mascota a tu cargo puede venir muy bien para la salud mental en caso de sufrir algún trastorno como estrés, ansiedad o depresión. Aunque obviamente depende del dueño, ya que si eliges cuidar y criar a un ser vivo es para hacerlo bien, de ahí que el can precisa de una atención y unos cuidados que algunas personas no podrían prestar.
Tu cama se ensuciará mucho más y con mayor frecuencia, los pelos inundarán tus sábanas y deberás dedicar unas horas extra a la limpieza
"La cercanía que sentimos con nuestras mascotas puede reducir la presión arterial y ayudarnos con el estrés y la depresión", observa Amanda Nascimento, veterinaria. "Esto se debe a que dormir con tu perro puede inducir la liberación de oxitocina en el cerebro, lo que disminuye los niveles de cortisol y la presión arterial, aliviando así estos trastornos mentales".
Además, evidentemente, dormir con tu mascota fortalece el vínculo entre tú y ella. "Este es gran beneficio, ya que un vínculo fuerte puede impactar considerablemente en tu vida a niveles positivos", sentencia la doctora. "La compañiá también puede aumentar tu sensación de seguridad y aliviar la soledad, consiguiendo que te sientas más cómodo y protegido. Algo sustancialmente beneficioso si lo que buscas es apoyo emocional.
Los contras
Nada que no hayas imaginado al comenzar a leer el artículo. Por ejemplo, ahora que llega el verano, dormir con tu perro en esta época puede resultar particularmente molesto, ya que desprende mucho calor. Por otro lado, tu cama se ensuciará mucho más y con mayor frecuencia, los pelos inundarán tus sábanas y deberás dedicar unas horas extra a la limpieza. Además de que si eres una de esa clase de personas que necesita cierta intimidad cuando duermen, podrás sentirlo como una intromisión.
Por otro lado, el animal puede ser un vector de transmisión de algunas enfermedades. O sin ir más lejos, de alergias y de polvo. Si eres especialmente sensible a estos elementos no te gustará dormir al lado de una criatura (ya sea grande o pequeña) que al sacarle a la calle recoge un alto volumen de motas de polvo o polen. Por tanto, si eres un poco obsesivo con la higiene o alérgico a este tipo de sustancias, lo mejor será que le convenzas (en este caso, adiestrándole) de que es hora de que duerma solo. Pero ante todo, que sea consciente que no por ello le quieres menos ni le vas a seguir colmando de abrazos y mimos.
Son tan adorables y demandan tantos cariños que resulta casi imposible decirles que no cuando llega la hora de irse a dormir y quieren subirse a la cama contigo. La compañía que proporcionan los perros y su infinita ternura para con sus dueños hacen que resulte que un lujo que duerman a tu lado, guardando tu descanso. Aunque por otro lado, muchos expertos y veterinarios condenan esta costumbre.