¿La pandemia te ha hecho replantearte tu empleo? 5 claves para enfocar el cambio
La crisis del coronavirus ha hecho que mucha algunos se replanteen sus prioridades y se abran a la posibilidad de dar un giro en su carrera profesional
La crisis del coronavirus lo ha colapsado todo. Desde que la enfermedad llegó al país se han visto afectados tanto el sistema sanitario como la economía pasando por la vida privada de mucha gente, pues hasta la fecha la pandemia se ha cobrado ya alrededor de 28.000 vidas en España y ha dejado más de 233.000 personas contagiadas de covid-19.
Pero más allá de lo sanitario y lo económico, las medidas de confinamiento decretadas por el Gobierno y el distanciamiento social, también han comportado un cambio abrupto en la vida de las personas. Junto a la emergencia del ámbito de la salud, estas han hecho que en los últimos meses mucha gente haya puesto sobre la mesa sus prioridades. Pasar tiempo con la familia y con los amigos ha adquirido un mayor valor así como también lo ha hecho el trabajo.
Muchas personas han perdido sus empleos y otras se han pasado gran parte del confinamiento haciendo horas extra desde casa. Tanto entre unas como entre las otras, es posible que hayan surgido grandes dudas: ¿Me llena realmente lo que hago? ¿Me apetece dar un vuelco de 360 grados a mi carrera? Y sobre todo, ¿cómo puedo hacerlo en medio de esta crisis?
La profesora de la London Business School y autora de 'Actuar como un líder, pensar como un líder', Herminia Ibarra, explica en la revista Harvard Business Review que las situaciones de crisis se presentan para los trabajadores como algo amenazante. "Estas situaciones nos llevan a comportarnos de manera conservadora, lo contrario de lo que se necesita cuando se está considerando dar un cambio en la carrera profesional. Es difícil dedicarse de lleno a reinventar una carrera si se tiene animadversión al riesgo o se está preocupado por el futuro", indica la experta, que ha estudiado el cambio en las carreras profesionales durante las últimas décadas, incluida la crisis financiera de 2008.
En la realización de su investigación Ibarra ha identificado cinco claves que pueden ayudar a todos aquellos que quieren reinventarse en su trabajo en tiempos difíciles y son estas:
1. Trabajar muchos yoes
"Cuando no sabes lo que te deparará el futuro, o cuando el cambio que pensabas que seguías da un giro inesperado, tiene sentido buscar una cartera diversa de opciones en lugar de simplemente apegarse a una sola idea", sostiene Ibarra. Según sus observaciones, incluso en los tiempos más felices, el cambio de carrera no es un proceso lineal. "Es un viaje de exploración necesariamente desordenado y para hacerlo bien, hay que experimentar, probar y aprender acerca de una gama de posibles yo", añade.
La experta apunta que estos posibles "yo" futuros pueden ser consistentes, es decir, estar pensados sobre una base de conocimientos que ya se tienen actualmente, estar testeados (haber trabajado antes en un sector o profesión concreta) o ser totalmente nuevos. Todo vale. "El camino haya una nueva carrera será como un circuito. Para cubrir todo el terreno tendrá que permitirse imaginar un conjunto divergente de posibles futuros. Acepta ese proceso y explora tantos como pueda", concluye.
2. Aprovechar el momento de cambio
Las épocas de cambio pueden ser desagradables. "La gente que las atraviesa se siente desanclada y pierde el rumbo oscilando entre el aguantar y el dejar ir. Pero esta etapa es una parte necesaria del viaje, ya que permite procesar mucha emociones complejas y deseos conflictivos y en última instancia impide cerrar de manera prematura etapas y perder opciones futuras", indica Ibarra.
La investigadora añade que es probable que la crisis del coronavirus actual prolongue el estado intermedio para mucha gente y cita a Bill Birdges en 'Transiciones', quien indica que en los tiempos en los que aparentemente se está siendo improductivos en realidad se puede hacer un gran trabajo interior. "Los estudios neurológicos sugieren que aprovechar el tiempo liminal para hacer este trabajo interior puede ser más beneficioso que hacer un gran esfuerzo de superación personal.
El tiempo de inactividad es crucial no solo para reponer las reservas de atención y motivación del cerebro, sino también para mantener los procesos cognitivos que nos permiten desarrollar completamente nuestra humanidad", explica la profesora, que añade que es así como el ser humano consolida los recuerdos, integrando lo que se ha aprendido, planificando el futuro, manteniendo la brújula moral y construyendo el conocimiento sobre uno mismo.
3. Poner en marcha nuevos proyectos
El camino más común para una reinvención profesional es formarse al margen del trabajo. Dedicar tiempo libre a investigar un nuevo campo y aprender las habilidades que requiere es esencial para llegado el momento dar un paso al frente. Sin embargo, lo más interesante, según la experta, es hacer esto mismo en varias áreas a la vez, comparando y contrastando los pros y los contras de cada una de ellas. "Esta actividad es crucial", recalca.
Ibarra se muestra consciente de que la actual crisis está limitando el presupuesto que muchos pueden dedicar a la formación, pero asegura que al mismo tiempo el mayor tiempo libre abre la puerta a retomar proyectos pasados que se quedaron parados o incluso a participar en iniciativas solidarias. "Lo importante es hacer un trabajo nuevo y diferente con personas nuevas y distintas, porque en ese proceso está la oportunidad de aprender sobre uno mismo, sobre las preferencias y los tipo de contexto en los que se siente cómodo, así como para conocer qué personas sacan lo mejor de uno", indica Ibarra.
4. Reactivar redes inactivas
Para maximizar las posibilidades de aprender cosas nuevas es importante contar con una red extensa de contactos. En este caso, Ibarra señala como regla de oro para el cambio de carrera la creación de una red movilizando a los "lazos débiles", es decir, volviendo a contactar con aquella gente a la que se conoce pero con la que se mantiene un contacto poco habitual. "El problema con los amigos, familiares y compañeros de trabajo cercanos, sus lazos fuertes, es que tienen los mismos conocimientos que usted. Querrán ayudarle, por supuesto, pero es poco probable que puedan aportar un punto de vista creativo sobre su futuro. Es más probable que le encasillen", argumenta la profesora.
El problema con los lazos débiles en una época de crisis como esta, es que pueden estar menos dispuestos a ayudar, por lo que Ibarra propone una fórmula que busca el equilibrio: recurrir a los que denomina como "lazos inactivos", aquellas personas con las que se tuvo una relación cercana pero con las que hace al menos tres años que no se ha tenido contacto. La profesora indica que un estudio realizado con información de más de 200 ejecutivos, indicó que los consejos e indicaciones que recibieron de estas personas con las que habían perdido el contacto sobre sus proyectos futuros fueron mucho más útiles en el futuro que los que habían recibido de sus personas cercanas.
5. Hablar sobre ello
Pensar en hacer un cambio profesional drástico puede generar confusión, por lo que algunos prefieren meditarlo en silencio. Sin embargo, las investigaciones que hizo Ibarra para dar forma a su libro 'Identidad del trabajo' la han llevado a recomendar que esta introspección se combine con conversaciones con los más cercanos, pues no decirlo en voz alta nunca puede llevar a que el proyecto se diluya en el "reino de los sueños", un espacio que "no proporciona empleo remunerado ni satisfacción profesional".
Ibarra asegura que aunque se esté atravesando una crisis, es un buen momento para comenzar una carrera, sin embargo, no se debe hacer solo. El simple hecho de contar en voz alta el proyecto a personas de confianza puede ayudar a clarificar ideas y a incorporar algunas nuevas. De hecho, para conseguir una conversación fructífera sobre el futuro son ideales los cursos, pues sus asistentes, generalmente abiertos a los cambios y en busca de nuevos conocimientos, pueden aportar ideas frescas muy reveladoras.
La crisis del coronavirus lo ha colapsado todo. Desde que la enfermedad llegó al país se han visto afectados tanto el sistema sanitario como la economía pasando por la vida privada de mucha gente, pues hasta la fecha la pandemia se ha cobrado ya alrededor de 28.000 vidas en España y ha dejado más de 233.000 personas contagiadas de covid-19.