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La única cosa que puede destrozar tu matrimonio perfecto
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¿EL UNO PARA EL OTRO?

La única cosa que puede destrozar tu matrimonio perfecto

¿Crees que tenéis una relación ideal y pensáis dar el paso? Pasar al altar implica asumir que lo vuestro va a ser lo más importante, y no muchas personas están preparadas para ello

Foto: Foto: iStock.
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¿Cuál es el secreto de un matrimonio perfecto? Nadie lo sabe. Probablemente, si acudes a algún terapeuta sexual te diga que lo más importante es la comunicación. Y que el mejor signo de que va bien o mal es el de la frecuencia del arte amatorio. Pero en general, si ya lleváis bastante tiempo juntos, puede que os suceda que os conozcáis el uno al otro más que a vosotros mismos, algo muy bueno o muy malo dependiendo de la situación.

Y a pesar de esto, puede que todavía no sepáis en qué estáis fallando para que ya no seáis tan felices. O al menos, no compartáis tantos momentos juntos o noches de pasión. Para Tesia Blake, periodista de 'Medium', solo hay una razón que precede a todas las demás: no considerar vuestro matrimonio como el pilar en el que se sustenta vuestra vida.

Si alguno de los dos decide centrarse más en sí mismo, cuando os paréis a pensar, ya no seréis un equipo y no os necesitaréis

Podría decirse que Blake se erige como defensora de las bodas, en un mundo en el que los índices de divorcio no dejan de aumentar y el amor parece que ya no es para siempre. Para ella, el matrimonio es una unión que te sitúa dentro de la sociedad, que da sentido a tu vida al querer formar parte de algo y además te aporta seguridad y tranquilidad. La vida, al fin y al cabo, no es fácil, y la unión entre dos personas representa ese espacio de intimidad que todo el mundo necesita para hacerle frente.

"Los problemas empiezan cuando un cónyuge empieza a dar por sentado todo lo que hace o piensa el otro", asegura la periodista. "Y es entonces cuando deberíais priorizar la relación, a riesgo de que se acabe de inmediato". En este sentido, como dice el sacerdote en la ceremonia, el matrimonio debe ser la unión a partir de la cual os sobrepongáis a todas las situaciones difíciles que vais a atravesar en los próximos años.

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"Si alguno de los dos decide dedicar más tiempo a vuestras carreras profesionales o estar con vuestros amigos, comenzaréis a desviaros hacia vuestros propios objetivos por separado. Cuando os detengáis a pensarlo, ya no seréis un equipo. Ya no os necesitaréis el uno al otro", señala Blake. Entonces, ¿a dónde fue el amor del que hacíais gala? Por la ventana.

La perspectiva de la periodista es bastante drástica. Es por ello que deberías pensarlo no una ni dos veces, sino más de tres el hecho de contraer matrimonio, ya que la probabilidad de que no funcione puede resultar mucho más grande que sentir que de verdad estáis hechos el uno para el otro y queréis compartir la vida juntos. Es decir, casarse no es un mero trámite o una elección que puede revocarse, sino que lo que de verdad estás haciendo es elegir la persona (y solo una) con la que teóricamente quieres pasar el resto de tu vida, una decisión bastante importante.

Foto: Una pareja se da la espalda. (iStock)

En todo caso, de equivocarte, lo que te espera es bien conocido: "Si la relación no es una prioridad, un día te despertarás y te darás cuenta de que habéis vivido juntos durante treinta años como compañeros de piso, cada uno con lo suyo, y en ese momento en el que todo termina, apenas os reconoceréis el uno al otro", advierte Blake. "Que no te extrañe, no os habéis mirado en años", añade.

Los motivos más locos

Más allá de la visión de la periodista, que a juzgar por sus palabras o está viviendo en un matrimonio perfecto o ha vivido de cerca lo dura que es una separación, hay más motivos por los que aquellas historias de amor que parecían perfectas acaban malográndose y, de la noche a la mañana, se separan. Hace tiempo un hilo de Reddit recogió lo que pensaban los abogados que han trabajado con parejas que deseaban separarse. Algunas de ellas fueron realmente esperpénticas, por ejemplo uno no llegó ni a la noche de bodas.

"El novio tuvo una gran discusión con sus nuevos suegros durante el enlace y se fue de su propia boda a las cinco de la madrugada", asegura uno de los abogados. "Se emborrachó, a ella no le gustó y decidió divorciarse justo después de la luna de miel, que por cierto, tuvo que pasar ella sola". Sin duda, hay gente que tiene muy mala suerte. Ni el mejor giro de guion podría dar con su historia: "La novia se divorció a los dos meses de la ceremonia debido a que le regaló un estuche para cumpleaños en vez de las joyas caras que ella quería". Con la bisutería no se juega. Si tienes alguna historia tan extraña como estas, no dudes dejarla en los comentarios.

¿Cuál es el secreto de un matrimonio perfecto? Nadie lo sabe. Probablemente, si acudes a algún terapeuta sexual te diga que lo más importante es la comunicación. Y que el mejor signo de que va bien o mal es el de la frecuencia del arte amatorio. Pero en general, si ya lleváis bastante tiempo juntos, puede que os suceda que os conozcáis el uno al otro más que a vosotros mismos, algo muy bueno o muy malo dependiendo de la situación.

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