El mejor momento del día para tomar un vaso de leche
Es una bebida llena de nutrientes y vitaminas, pero, ¿qué aconsejan los médicos exactamente? ¿A qué hora del día su digestión es más idónea?
Los seres humanos somos prácticamente los únicos que seguimos tomando leche en nuestra adultez. Probablemente has escuchado esta frase más de una vez en alguna persona, más si es detractora de la bebida. Y es bien cierto, pues las opiniones son tan variadas como marcas hay en el mercado: algunos aseguran que es fundamental porque aporta calcio muy necesario a los huesos, mientras que otros indican que produce muchas intolerancias y, en algunas ocasiones, incluso alergias.
Se aconseja generalmente a los niños que consuman leche durante sus primeros años, al menos una o dos veces al día. Si tú eres un fan de la bebida blanca te alegrará saber que contiene vitaminas A, B1, B2, B12 y D, además de magnesio, potasio, proteínas, grasas y carbohidratos. Una sola taza contiene además el 21% del valor diario de calcio. Ahora bien, ¿cuándo es el mejor momento para tomarla?
En el desayuno
Lo cierto es que es uno de los momentos más comunes para beber este preciado líquido blanco, puesto que mucha gente decide tomarla con el café o sola. Como ya hemos dicho que aporta vitaminas, minerales, proteínas, etcétera, por lo que es una opción genial para comenzar el día. Si tomas un vaso antes de salir de casa, además, absorberás mejor la vitamina D proveniente de tu exposición al sol y fortalecerás huesos y dientes. El aporte de vitamina A también ayudará a tus ojos a protegerse de la luz y las radiaciones (esto es especialmente beneficioso si vas a pasar muchas horas mirando una pantalla).
Después del ejercicio
También es una buena idea porque aumenta la fuerza muscular. Según explican en 'Medical Daily', sirve para acelerar el metabolismo al dar una sensación de saciedad una vez consumida. Esto conduce a la pérdida de peso porque tiene pocas calorías pero está llena de una gran cantidad de nutrientes. Sin embargo, es posible que tengas que vigilar la cantidad de ingesta ya que (como en todo), si consumes grandes cantidades podrías acabar ganando peso.
Por la noche la leche actúa como sedante y te ayuda a dormir mejor. Durante el día es buena para absorber la vitamina D del sol
Se dice que la leche estimula el crecimiento muscular y regula la masa corporal tras hacer ejercicio. Un estudio siguió a diez mujeres que realizaron entrenamiento de fuerza cinco días a la semana durante tres meses. Bebieron leche sin grasa después de sus entrenamientos y ganaron masa muscular mientras reducían la grasa corporal, especialmente en comparación con las personas que no ingirieron esta bebida después de sus entrenamientos.
En la comida o la cena
Es probable que no estés muy acostumbrado a beber leche en la comida, pero lo cierto es que es beneficioso para quitarte las ganas de comer dulce (y, obviamente, tiene menos calorías que otros postres), pero si realmente quieres dormir bien lo suyo sería que atacaras por las noches. Según explica el doctor Dhanvantri Tyagi en un artículo publicado en 'NDTV': "La suposición común de que la leche debe consumirse por la mañana es errónea, los niños mayores de cinco años deberían dejar de tomarla". Explicó que si la bebías durante las primeras horas del día causaba pesadez, letargo y acidez, y que el momento ideal era la noche.
Esto se debe principalmente a que la leche actúa como un sedante y el contenido de serotonina calma la mente y relaja para que puedas dormir bien. La absorción de calcio ocurre más por la noche, ya que el cuerpo no realiza ninguna actividad y ayuda a quienes intentan desarrollar masa corporal. Además, se dice que las propiedades digestivas de la leche funcionan a altas horas de la noche.
Por tanto, en función de lo que pretendas incentivar, la decisión recae en ti. No hay un momento idóneo para la digestión, la clave está en comprar leche de calidad y conservarla en frío para que no pierda sus propiedades.
Los seres humanos somos prácticamente los únicos que seguimos tomando leche en nuestra adultez. Probablemente has escuchado esta frase más de una vez en alguna persona, más si es detractora de la bebida. Y es bien cierto, pues las opiniones son tan variadas como marcas hay en el mercado: algunos aseguran que es fundamental porque aporta calcio muy necesario a los huesos, mientras que otros indican que produce muchas intolerancias y, en algunas ocasiones, incluso alergias.
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