Lo que debes hacer 30 minutos antes de acostarte para adelgazar
Realizar una serie de actividades bastante sencillas podría ser clave para eliminar la grasa abdominal según apuntan varios estudios
Si preguntamos a distintos profesionales cuál es el mejor lugar del mundo para adelgazar,... "¡El gimnasio!", dirían enérgicamente los entrenadores personales levantando sus fornidos brazos, aunque en realidad no llegarían muy arriba porque sus deltoides se lo impedirían. "¡La pista!", gritarían los corredores y ciclistas. "¡La cocina!", chillarían los nutricionistas, dietistas y proveedores de productos orgánicos.
Pues podría ser que todos estén equivocados (sabemos perfectamente que eso es lo que quieres leer). Porque la pérdida de peso real, exitosa y sostenible proviene de lograr la excelencia en un ámbito completamente inesperado: el dormitorio.
Pero no, aunque te gustase que así fuera, no vamos a hablar de sexo. Eso sí, podrías dormir hasta convertirte en una persona más delgada. De hecho, no importa cuántos kilos levantes, cuántos kilómetros camines, cuánta lechuga comas, no te acercarás a tus objetivos de pérdida de peso a menos que también estés durmiendo lo suficiente.
Investigadores de la Universidad de Chicago descubrieron que un sueño por debajo de la media podría entorpecer la pérdida de peso en un 55%. La buena noticia es que solo algunos pequeños cambios en tu rutina de antes de dormir pueden significar el éxito para eliminar tu 'gordominal'.
Bebe una taza de té
El estudio señala que relajarse con una taza de té rooibos puede ayudarte a quemar grasa abdominal mientras lo haces. Esta bebida descafeinada de forma natural está hecha de las hojas de la planta del "arbusto rojo", que se cultiva exclusivamente en Sudáfrica.
Un estudio de la Universidad de Chicago señala que dormir por debajo de la media (entre 7 y 8 horas) podría entorpecer la pérdida de peso en un 55%
Lo que hace que el té rooibos sea particularmente bueno para tu abdomen es un flavonoide único y poderoso llamado Aspalathin, recoge 'Eat This, Not That!'. La investigación muestra que este compuesto puede reducir las hormonas del estrés que desencadenan el hambre y el almacenamiento de grasa.
Entrenamiento de resistencia
El entrenamiento de resistencia previo al sueño puede ayudar a optimizar el peso que pierdes durante el sueño. Según un estudio publicado en el 'International Journal of Sport Nutrition', los sujetos que realizaron ejercicios de resistencia tuvieron una tasa metabólica en reposo más alta durante 16 horas después del entrenamiento. Si generalmente haces ejercicio a primera hora de la mañana, la pérdida de peso durante el sueño no se verá afectada por ese aumento en el metabolismo.
Date una ducha o un baño
Un estudio de la Universidad de California en Los Ángeles (sobre las últimas tribus de cazadores-recolectores que quedan en el mundo) señaló que las caídas de temperatura eran una señal importante de sueño para nuestros antepasados paleolíticos. Aunque ya no durmamos bajo las estrellas, puedes recrear una caída de temperatura similar a la de un atardecer tomando un baño o ducha caliente.
Sigue la regla de los 20 minutos
Si no eres capaz de dormirte después de estar 20 minutos dando vueltas en la cama, levántate, sal de la habitación y realiza alguna actividad tranquila y sin estímulos. Por ejemplo leer un libro u hojear un catálogo.
Triptófano
¡No cuentes ovejas, come pavo! El triptófano, un aminoácido que se encuentra en la mayoría de las carnes, ha demostrado poderosos efectos inductores del sueño. Un estudio entre insomnes señaló que solo un cuarto de gramo de este (que lo encontrarás en un muslo de pollo sin piel o en la misma cantidad de pavo) basta para aumentar significativamente las horas de sueño profundo. Y eso puede traducirse en adelgazar fácilmente.
Un estudio descubrió que las personas que olían menta cada dos horas perdieron de media de 2,25 kilos por mes
Investigadores de la Universidad de Colorado descubrieron que las personas que hacen dieta consumen un 6% menos de calorías cuando no duermen lo suficiente. Para alguien con una dieta de 2.000 calorías, son 120 calorías por día. La National Sleep Foundation de EEUU sugiere dormir entre siete y ocho horas.
Come queso cottage
Evitar completamente la comida antes de acostarte puede ser malo para los objetivos de pérdida de peso. Acostarte con la barriga rugiendo hace que conciliar el sueño sea difícil. De hecho, las personas que se despiertan con hambre tienen muchas más probabilidades de tomarse un desayuno voluminoso. Por ello, toma un poco de queso cottage antes de acostarte. No solo es rico en proteína de caseína, también contiene el aminoácido triptófano.
Crea una rutina
Al hacer lo mismo todas las noches, durante al menos una hora antes de acostarte, en realidad estás programando activadores del sueño. Estos factores desencadenantes pueden incluir escribir en un diario, tomar un poco de queso cottage o cualquier otra actividad de esta lista que estamos desgranando. Con el tiempo, tu cerebro comenzará a asociar esas actividades con la hora de acostarte y acelerará tu sueño de quemar grasa.
Haz algunos ejercicios de peso corporal
Tal vez vestirte e ir al gimnasio después de anochecer no es lo tuyo, algo completamente comprensible. Pero eso no significa que no puedas usar tu peso corporal para un entrenamiento rápido antes de acostarte. Según el autor de 'Combat the Fat', Jeff Anderson, los ejercicios de peso corporal (como las flexiones y las sentadillas) entrenan el músculo de una manera única debido al efecto de la gravedad.
Toma un poco de menta
Ciertos olores pueden hacer que se te haga la boca agua y otros pueden eliminar tu apetito. Un estudio publicado en el 'Journal of Neurological and Orthopaedic Medicine' descubrió que las personas que olían menta cada dos horas perdieron de media de 2,25 kilos por mes. El plátano, la manzana verde y la vainilla tuvieron efectos similares.
Podrías plantearte encender una vela de menta hasta que te vayas a la cama para llenar la habitación de olores adelgazantes. Si no desea molestarse en apagar las velas antes de meterte en las sábanas, intenta añadir unas gotas de aceite de menta a tu almohada. Una pequeña taza de té de menta es otra opción que vale la pena probar.
Si preguntamos a distintos profesionales cuál es el mejor lugar del mundo para adelgazar,... "¡El gimnasio!", dirían enérgicamente los entrenadores personales levantando sus fornidos brazos, aunque en realidad no llegarían muy arriba porque sus deltoides se lo impedirían. "¡La pista!", gritarían los corredores y ciclistas. "¡La cocina!", chillarían los nutricionistas, dietistas y proveedores de productos orgánicos.