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Por qué te despiertas en medio de la noche con un brazo dormido
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Por qué te despiertas en medio de la noche con un brazo dormido

Es una sensación muy desagradable que sucede en algunas ocasiones y solemos achacar a falta de riego sanguíneo, pero la realidad a veces es otra

Foto: Foto: iStock.
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Es una de las sensaciones más desagradables que existen en el mundo. Te despiertas en medio de la noche y notas que tu brazo se ha convertido en un cactus, como si miles de agujas te pincharan la piel y al intentar mover los dedos esa impresión se acentúa. Poco a poco, tu brazo dormido se va despertando, y tú puedes volver a abrazar a Morfeo.

De niños, las primeras veces que eso nos sucede entramos en pánico, pensando que nunca volveremos a recuperar nuestro preciado miembro. Conforme nos hacemos adultos descubrimos que el brazo siempre vuelve, aunque puede preocuparnos el hecho si nos sucede a menudo. En general pensamos que se debe a que nos falla el riego sanguíneo, pero la realidad es otra.

Los nervios

James Dyck, investigador de neurología de la Clínica Mayo, cuenta en 'Vox' que se trata de un fenómeno muy común: "Es un buen ejemplo de cómo el cuerpo trata de protegerse de la parálisis del sueño". Aseguró que la creencia de que el entumecimiento o la sensación de alfileres tiene que ver con la falta de flujo sanguíneo en los nervios es típica pero que en realidad es completamente errónea. "Lo más probable es que se deba a la comprensión nerviosa. Los nervios están siendo presionados y aplastados y eso causa los síntomas", explica.

Un motivo es que durante el sueño REM el cerebro envía una señal para causar parálisis. Otro, que durante esa fase estabas en mala postura

En el brazo tenemos varios nervios, cada uno de ellos cumple una función: el axilar levanta el brazo por el hombro, el musculocutáneo dobla el codo, el radial endereza el brazo y levanta la muñeca y los dedos y el cubital extiende estos últimos. Dyck explica que no se comprende completamente la fisiología exacta, pero que el efecto que se produce al comprimir estos nervios durante el sueño es algo parecido a pisar una manguera.

Pero, ¿por qué se siente paralizado el brazo al despertar? Dyck sugiere dos razones: la primera es que está temporalmente paralizado porque durante el sueño REM el cerebro ha enviado una señal para causar parálisis. El propósito de esto es evitar que te actúes y en definitiva te muevas mientras duermes, pero el problema es que si te despiertas durante esta fase estarás consciente pero no habrás recuperado aún el control de tus extremidades, lo que puede provocarte verdadero terror. A este estado en el que te encuentras atrapado entre el sueño y la vigilia se lo conoce como parálisis del sueño, y en la antigüedad se conocía como "subida del muerto".

Si te duermes tras beber alcohol en mala postura podrías tener problemas, porque la capacidad de tu cuerpo para despertarte y protegerte será menor

La segunda razón puede deberse a que tu brazo se encontraba en una mala posición durante la fase REM. De esta manera se comprimen los nervios, y eso puede dañarlos, pero lo bueno es que el cuerpo se despierta cuando esto sucede, como mecanismo de protección. Cuando abres los ojos y tratas de aliviar la presión, los nervios vuelven a funcionar y es entonces cuando experimentas esa sensación tan desagradable de alfileres en tu piel, pero, contrariamente a lo que podías pensar, es una buena señal. Se trata de una fase temporal que significa que tus nervios están volviendo a la vida.

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En general, es poco probable que tus nervios se dañen por haberte quedado dormido en una mala posición. Aunque Dyck recalca que: "Si te desmayas en estado de embriaguez sí puedes tener más problemas, porque el alcohol deteriora la capacidad de tu cuerpo para despertarte y protegerte. También existe la neuropatía hereditaria con riesgo de parálisis por presión, una condición genética que hace que las personas sean más susceptibles a las lesiones por comprensión nerviosa, por lo que estas personas tendrían que tener más cuidado y evitar quedarse dormidas en malas posturas", pero en general, asegura, se trata de una molestia temporal y no hay que preocuparse mucho al respecto.

Es una de las sensaciones más desagradables que existen en el mundo. Te despiertas en medio de la noche y notas que tu brazo se ha convertido en un cactus, como si miles de agujas te pincharan la piel y al intentar mover los dedos esa impresión se acentúa. Poco a poco, tu brazo dormido se va despertando, y tú puedes volver a abrazar a Morfeo.

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