Este hombre ganó millones a la lotería y hoy es uno de los árabes más famosos de Israel

El sueño de las personas que tradicionalmente participan en los juegos de azar es que, un día, la suerteles sonría y consigan ganar el premio que les permita vivir de las rentas el resto de su vida. Por eso, cada semana se repite millones de veces en todo el mundo el mismo proceso: personas que se acercan a los puntos de venta de lotería para comprar sus boletos con la esperanza de que les cambie el futuro.

Pero el caso de Jawdat Ibrahim es tan diferente que merece ser conocido. Este hombre árabe-israelí se fue a vivir a Estados Unidos siendo apenas un niño. Creció y comenzó a trabajar como operario de grúa en Chicago, convirtiéndose en uno más de los inmigrantes que podían ganarse la vida en Norteamérica. Pero un día, solo uno, decidió comprar un billete de lotería y esa decisión le iba a cambiar la vida por completo.

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Era el año 1990 y Jawdat Ibrahim ganó 25 millones de dólares a la lotería. Sin embargo, lo que fue una gran noticia se convirtió en un vía crucis después de que la Lotería del Estado de Illinois tratara de negarse a pagarle por un tecnicismo. Ibrahim demandó al organismo y, aunque tardó varios meses en conseguir el veredicto, ganó, recibiendo además una compensación millonaria que sumar a su premiooriginal.

Vuelta a los orígenes

Este modesto trabajador podía permitirse en ese momento vivir en cualquier lugar del mundo, pero decidió que lo que quería era regresar a su tierra. Así que decidió volver a Abu Ghosh, una pequeña ciudad a las afueras de Jerusalén en la que viven mayoritariamente ciudadanos árabes. No solo eso, quiso hacer algo para favorecer el entendimiento entre judíos y palestinos.

Aunque podía haber elegido cualquier lugar del mundo para vivir, decidió regresar a su ciudad natal, cerca de Jerusalén

Ibrahim abrió un restaurante en 1993 y lo llamó como su ciudad, Abu Gosh. Pero no solo quería dar de comer a quien quisiera acercarse a su nuevo negocio, sino que lo usó para reunir a israelíes y palestinos en conversaciones informales sobre paz y el problema de Oriente Medio. Su negocio prosperó tanto como su fama y hoy Jawdad Ibrahim es uno de los árabes-israelíes más conocidos de todo el país.

Parte de culpa la tiene el hecho de que su restaurante entrara en el Libro Guiness de los Récords en el año 2010. Fue gracias a la ración de hummus más grande jamás cocinada: en total, 4.087 kilos de este tradicional plato árabe que doblaban el récord anterior gracias a una enorme fuente de más de seis metros de anchura.

Pero la lotería permitió que Ibrahim sea hoy la persona que es: sigue siendo un modesto empresario que disfruta con su restaurante, pero al mismo tiempo se le abren las puertas más poderosas tanto de israelíes como de palestinos. A todos los reúne en su restaurante en lo que parece una minicumbre de la ONU y todos, judíos, palestinos y árabes-israelíes comparten mesa y mantel en Abu Gosh.

Fama y respeto gracias a la lotería

Ibrahim quería invertir los millones de dólares que ganó con la lotería en Estados Unidos en algo importante. Por eso levantó Abu Gosh, un restaurante que cuando abrió en 1993 era como un oasis en el desierto, pero que hizo efecto llamada y generó un gran desarrollo en su ciudad. Hoy hay más de una decena alrededor, un gran centro comercial y ese pequeño punto cercano a Jerusalén se han convertido en el epicentro mundial del hummus para los amantes de esta comida.

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Jawdat Ibrahim explica a la BBC su filosofía de vida: "Amo a las personas y construí el restaurante para tener la oportunidad de unir a la gente. Los árabes y los judíos nacimos aquí así que tenemos que convivir. ¿Por qué no hacer que la vida sea bonita? ¿Por qué tenemos que pelear? Creo que hay suficiente tierra para ambos".

Ese mensaje ha calado hondo a ambos lados de la frontera y son muchos los que le consideran un auténtico héroe o, incluso, un ídolo. No desespera en sus modestos intentos por conseguir la paz en esta zona del mapa y señala que la única manera de que llegue es a través de la comprensión entre los pueblos.

Cuando ganó la lotería en 1990 decidió que quería hacer algo más que disfrutar de los 25 millones de dólares que había en su cuenta

Jawdat Ibrahim levanta por igual el teléfono a los líderes palestinos y a los israelíes y es uno de los rostros más conocidos por los ciudadanos de ambos países. Ganó 25 millones de dólares a la lotería en 1990 y decidió utilizarlos en beneficio de los demás. Su historia ha servido de inspiración para otras personas, que quieren seguir su ejemplo de concordia y solidaridad.