Un hombre tiene que recorrer tres tiendas para saber que ganó un millón a la lotería

Estamos acostumbrados a escuchar que la suerteestá en cualquier lugar y siempre hay una historia que certifica que encontramos la fortuna cuando menos la esperamos. Ya sea un billete perdido en la calle o un décimo de lotería premiado, lo cierto es que nunca se sabe cuándo la suerte se cruzará en nuestro día a día.

Lo ha comprobado Robert Calfee. Su historia es la de un cliente habitual de Zack’s Express, una tienda de comestibles de Glasgow, en el estado norteamericano de Kentucky. Hace sus compras de manera habitual, se toma un café de vez en cuando y charla con el dueño, Masaf, que asegura que es una buena persona.

Como hace cada vez que entra en la tienda, además de hacer sus compras de alimentación, Calfee selló un boleto de lotería en la tienda el pasado viernes y después se marchó a su casa. Al día siguiente regresó a la tienda de Masaf: había pasado por otro puesto de loterías para ver si su boleto estaba premiado pero la cantidad a cobrar era demasiado alta y no se lo podían pagar. Así dos veces.

“No me vaciles”

Robert Calfee desconocía cuánto había ganado, así que dio el boleto a Masaf para que lo introdujera en la máquina. El dueño de la tienda lo hizo y sonrió a su cliente: “Has ganado un millón de dólares”. El afortunado pensó que era una broma y no se lo podía creer, por lo que espetó al dueño de la tienda un claro “no me vaciles”.

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Pero no, no era ninguna broma, acababa de convertirse en millonario en un instante: “No lo creí al principio, pero él me enseñó la pantalla del ordenador y yo mismo lo vi. Ahí estaba por escrito: había ganado un millón de dólares”. Hacía realidad el sueño de millones de personas que participan a diario en los juegos de azar.

Calfee recuerda cómo recibió la noticia: “Pensé que tal vez había ganado entre 800 y 6.000 dólares cuando no me pudieron pagar el billete en la primera tienda. Pero cuando fui a una segunda que tiene un límite mayor y me dijeron que tampoco podía cobrarlo, me dije: "¿Qué, son más de 25.000 dólares?’ Y empecé a volverme loco".

Robert ingresará un total de 710.000 dólares, después de que pague un 29 por ciento de su premio en impuestos

Efectivamente, cada puesto de venta de lotería en Estados Unidos está autorizado a pagar premioshasta un límite máximo. Por eso cuando después de ir a dos tiendas distintas no pudo cobrar su billete, comenzó a ponerse nervioso: era consciente de que tenía algo grande y decidió ir al mismo sitio donde lo había comprado.

Una galleta de la suerte

El resto es historia: el dueño de la tienda le dio la buena nueva y Robert Calfee, a sus 66 años, se convertía en millonario. De su millón de dólares tendrá que pagar un 29 por ciento en impuestos, entre estatales y federales, por lo que le quedarán limpios algo más de 700.000 dólares, que suponen casi 650.000 euros al cambio.

El ganador ha asegurado a la emisora de radio local WCLU que el premio no le va a afectar como persona: “Un millón no me va a cambiar. Me he comprado ya una casa nueva y he pedido también un coche nuevo. Pero, por lo demás, ya tengo todo lo que necesito”. Piensa seguir con sus rutinas diarias y disfrutar de la vida como lo hace hasta ahora.

Además, en una entrevista concedida a WKYT, Robert Calfee asegura que la suerte estuvo de su parte porque utilizó los números que le aparecieron en una galleta de la suerte: “Llevaba seis meses jugando esos números. La verdad es que sabía que me iba a tocar antes o después, lo que no sabía era cuándo”.

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Además del premio de Calfee, el dueño de la tienda donde se selló el boleto también se llevará un buen pellizco. Masaf cobrará el 1 por ciento del premio, 10.000 dólares en total, por lo que estaba feliz tanto de haber hecho millonario a un cliente como de recibir esa compensación. Un nuevo millonario más que deja la lotería Megamillones en Estados Unidos.