Cinco destinos que te sorprenderán si los visitas en otoño

Como a las personas, que a quienes tienen un tono de piel más pálido y el pelo oscuro les favorecen los colores fríos e intensos, también hay paisajes que lucen más con los colores propios de una estación determinada del año. Por ejemplo, las noches de verano en Marbella o en Tarifa o las tardes de primavera en Madrid son buena muestra de ello, pues durante estas épocas, estas ciudades y su entorno brillan haciendo gala de una vitalidad distinta a la que muestran el resto del año.

Ahora, con la llegada del otoño, que arranca este año arranca este mismo lunes 23 de septiembre, es la época perfecta para disfrutar de aquellos entornos a los que los que les favorecen los tonos marrones y ocre. Por eso, si estás pensando en hacer una escapada para que el arranque del nuevo curso no se te haga tan pesado hasta la llegada de la Navidad, deberías echarle un ojo a los siguientes destinos, pues estarán con el guapo subido en los próximos meses:

Parque Natural del Montseny, en Barcelona

El Parque Natural de Montseny, a solo 50 kilómetros de Barcelona, es una de las opciones que plantean desde la compañía de alquiler de autocaravanas Indie Campers, pues, este entorno, declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco, ve durante el otoño cómo sus colores mutan hacia el verde oscuro, el ocre, los tonos rojizos y los dorados que conforman un paisaje muy agradable en el que sumergirse en la naturaleza y disfrutar de rutas o paseos.

Los parques de Ámsterdam

Otra opción, esta ya internacional, es Ámsterdam. Además de los entresijos y canales de la capital de los Países Bajos, el entorno de la ciudad ofrece en otoño estampas únicas. Allí se puede disfrutar de la naturaleza recorriendo la ruta de los molinos que atraviesa el Parque Nacional de Doge Voluwe, un entorno protegido de 5.000 hectáreas en las que habitan ciervos, jabalíes y muflones entre otras muchas más especies de animales y en el que está localizado el Kröller- Müller Museum que acoge la segunda colección más importante del famoso pintor de girasoles Vicent van Gogh. Además, en Amterdam también se puede visitar el parque Vondelpark, el más importante de la ciudad y uno de los más recomendados para disfrutar de un día de bicicleta en un entorno familiar.

Lago de Como, en Italia

La tercera opción está en Italia. En la región de Lombardía, se sitúa el lago de Como, el tercero más grande del país con 146 kilómetros cuadrados y el quinto más profundo de toda Europa, con 416 metros de profundidad, que ofrece a quines lo visitan un paisaje inigualable en tonos pastel y la posibilidad de visitar los pequeños pueblos que ocupan su ribera, entre los que destaca Bellagio, un pequeño municipio de calles estrechas y empinadas.

Hamburgo, en Alemania

Los colores del otoño inundan Hamburgo cuando llega esta estación. El amarillo, una larga gama de tonos marrones y diferentes rojos se abren paso en la vegetación de la ciudad pero sobre todo, se pueden disfrutar en el conocido cementerio de Ohlsdorf, uno de los más grandes del mundo con hasta 400 hectáreas de superficie. Allí, además de 12 capillas y 280.000 tumbas, también se puede disfrutar de diferentes eventos culturales como conciertos, funciones de teatro o incluso proyecciones de cine. Además, el otoño también se hace patente en el jardín botánico de la ciudad, otra de las paradas obligatorias si se visita Hamburgo en esta época.

París, en Francia

Aunque casi todos los momentos son óptimos para visitar París, la ciudad de la luz y del amor tiene un aura especial en otoño, pues tanto el jardín de Tuileires, el más grande y antiguo de la capital del país vecino como el bosque de Bolougne y el parque de de Belleville, se tiñen de tonos ocre para dar paso a un paisaje distinto al que ofrecen en verano. Además, antes de la llegada del invierno frío y después de que haya pasado la época estival, París se vacía un poco de turistas, por lo que los próximos meses pueden ser una oportunidad ideal para visitarlo.