Un estudiante gana un millón a la lotería justo antes de plantearse trabajar en verano
Su padre le recogió en su coche para ir a comer juntos y abordar su trabajo de temporada, pero el estudiante verificó los números que había jugado a la lotería y su destino cambió
Muchos jóvenes aprovechan el verano para buscarse un trabajo y ahorrar un dinero. Para muchos es la forma de pagarse sus estudios al año siguiente; para otros, la fórmula de conseguir ingresos para poder irse de vacaciones con sus amigos. Pensar en trabajar en verano es algo habitual para los jóvenes, pero la gran mayoría lo evitarían si fuera posible.
Esa es la conversación que iban a tener Kristopher Chrysanthopoulos y su padre esta semana dado que el final de curso está a la vuelta de la esquina. A Kristopher no le hacía ninguna gracia tener que volver a trabajar este verano, pero su padre estaba convencido de que era lo que necesitaba y le había invitado a comer para hablar del asunto.
El padre de Kristopher pasó a recogerle para irse a comer por su casa de Oceanfront, en Nueva Jersey, pocos kilómetros al sur de Nueva York. No era el tipo de conversación que deseara tener con su padre enfrascado en sus exámenes de fin de curso, pero no había manera de evitar la comida y aplazar esa conversación.
“Tengo los cinco”
Pero mientras iban de camino al restaurante, el joven aprovechó para sacar su teléfono móvil y echar un rápido vistazo a los números que habían salido la noche anterior en la lotería. Kristopher entró en la web de la lotería de Nueva Jersey y localizó los números ganadores. Le iban a cambiar el verano de forma radical.
Kristopher verificó sus boletos, miró a su padre y dijo las palabras mágicas: “Papá, tengo los cinco”.
El joven había comprado algunos boletos para el sorteo de la lotería Mega Millones porque había un bote de más de 400 millones de dólares. Pero cuando comenzó a verificar los números uno a uno, se quedó pálido. Después de algunos segundos en los que no pronunció palabra, Kristopher miró a su padre y dijo las palabras mágicas: “Papá, tengo los cinco”.
Eso significaba que uno de los boletos que había comprado tenía los cinco números ganadores del sorteo y que sólo había fallado el complementario, el que entregaba los 414 millones de dólares que había en el bote. Pero con acertar los otros cinco números Kristopher se había convertido, según la web de la lotería, en el ganador de 1 millón de dólares.
Padre e hijo decidieron que lo mejor era hacer una parada a mitad de camino y entrar en alguna tienda que vendiera lotería para comprobar los boletos en su ordenador. Bajaron del coche nerviosos, se acercaron al dependiente y le pidieron que metiera el boleto en la máquina: automáticamente la pantalla anunció que había ganado 1 millón de dólares.
No trabajará en verano
La comida que el padre de Kristopher había preparado no tuvo nada que ver con la que tuvieron. Lógicamente no hablaron de tener un trabajo en verano, sino de analizar en qué se iba a gastar el dinero que acababa de ganar y si pensaba invertirlo. Kristopher escuchó los consejos de su padre y decidió lo que iba a hacer con su millón de dólares.
En palabras que recoge New Jersey Lottery, Kristopher asegura que piensa invitar a toda su familia a pasar las mejores vacaciones de su vida y que después guardará el resto del dinero en una cuenta de un banco. Es la mejor fórmula que ha encontrado para no tener que volver a trabajar en verano y tener siempre a mano unos ahorros por si los pudiera necesitar.
El joven Chrysanthopoulos, de origen griego, también explicó que suele jugar a la lotería, pero que prefiere hacerlo con los boletos del tipo rasca y gana, porque son instantáneos. Sin embargo, esta vez compró los billetes para el sorteo de Mega Millones porque vio el premio que había acumulado en el bote: los 414 millones de dólares llamaron su atención.
Compró los boletos para el sorteo de Mega Millones porque vio el bote: los 414 millones de dólares acumulados llamaron su atención
Kristopher Chrysanthopoulos, estudiante de la Rider University, no tendrá que volver a trabajar en verano porque la suertele sonrió el día que más lo necesitaba, cuando su padre le iba a explicar lo importante que es el esfuerzo para conseguir sus objetivos. Él lo consiguió… gracias a que jugó a la lotería indicada, el día señalado y en el lugar adecuado.
Muchos jóvenes aprovechan el verano para buscarse un trabajo y ahorrar un dinero. Para muchos es la forma de pagarse sus estudios al año siguiente; para otros, la fórmula de conseguir ingresos para poder irse de vacaciones con sus amigos. Pensar en trabajar en verano es algo habitual para los jóvenes, pero la gran mayoría lo evitarían si fuera posible.