Es noticia
Los hombres están dejando de tener amigos
  1. Alma, Corazón, Vida
los tiempos cambian

Los hombres están dejando de tener amigos

Los roles de géneros tradicionales obligan a los hombres a esconder sus sentimientos, pues la sensibilidad es vista como una debilidad. Esto les afecta a ellos y a las propias mujeres

Foto: Foto: iStock.
Foto: iStock.

"Tú me tienes a mí, Marge, pero ¿a quién tengo yo?",se pregunta el personaje de Homer Simpson en un capítulo en el que ha discutido con sus amigos. Una frase hilarante que, sin embargo, parece esconder una gran verdad: la masculinidad tóxica y la idea persistente de que los sentimientos son una cosa femenina ha dejado a una generación de hombres heterosexuales varados en una isla emocionalmente atrofiada, incapaz de forjar relaciones íntimas con otros hombres, y son las mujeres las que pagan el pato. Eso es lo que dice la periodista Melanie Hamlett en 'Harper's Bazaar'.

¿Por qué? "Durante años a los hombres se les ha enseñado a rechazar la sensibilidad. Crecen creyendo que no solo deben comportarse como robots estoicos frente a otros hombres y que las mujeres son las únicas personas a las que pueden acudir en busca de apoyo emocional", explica. Se refiere a las mujeres como 'buscadoras de oro emocionales', haciendo referencia a un tuit de la escritora Erin Rodgers: "Quiero que este término incluya a los tipos que buscan a una mujer que les brinde constantemente apoyo emocional".

Roles de género

No es la primera vez que se menciona algo así. El colectivo feminista lleva años advirtiendo de lo perjudiciales que son los roles de género para ambos sexos. Hace unos años 'The Huffington Post' sacó a la luz un vídeo que se llamaba '48 frases que los hombres escuchan a lo largo de su vida', en el que un montón de varones de distintas edades decían frases estereotipadas que, según explicaban, casi todos los chicos oyen alguna vez en su vida. "Sé un hombre, no seas marica", "todos los tíos ponen los cuernos, son así", o "los chicos no lloran" son algunos ejemplos.

No solo ellos son los perjudicados. "La mayoría de las mujeres con las que hablé para este artículo dicen ser 'muletas' para el hombre. Todas llegan a la edad de la jubilación teniendo que cuidar a madres, padres, maridos enfermos... si tienen hermanos ni por asomo pensarán en que ellos también pueden ayudar en estas tareas. Son consejeras y ejercen el papel de enfermeras. Los hombres, por otra parte, no suelen esforzarse por mantener las amistades una vez que se casan".

A los hombres se les enseña que mostrar sus sentimientos es una debilidad, por ello muchos no acuden jamás a terapia

Otro asunto tabú es, según la periodista, la necesidad de tener que ir a terapia. España tiene cuatro veces menos psicólogos por habitante que el resto de Europa, por lo que ese prejuicio del que habla Hamlett se incrementa en un país donde parece que si vas al especialista es porque estás para encerrar. "Hay una idea arraigada de que buscar terapia es una forma de debilidad, ellos no solo son menos propensos que las mujeres a buscar esta clase de ayuda, sino que cuando lo hacen les cuesta mucho expresar sus emociones. Todo esto viene porque nunca se les ha enseñado a identificar sus necesidades emocionales".

En Estados Unidos solamente el 5% de los hombres buscan ayuda mental, a pesar de sentirse más solos que nunca: un estudio reañozado en Inglaterra por la Fundación Movember concluyó que 2,5 millones de hombres admitían no tener amigos cercanos. Algo que se triplicaba entre los 20 y los 30 años, más aún si estaban casados. Ellos son, además, más propensos a suicidarse que las mujeres. En 2016 -el último año en el que la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó cifras globales- se produjeron aproximadamente 793.000 muertes por suicidio, y la mayoría, de hombres. Paradójicamente, ellas tienen una mayor tasa de diagnósticos de depresión, ¿quizá porque, al contrario que ellos, acuden al psiquiatra?

Foto: Foto: Paulius Dragunas (Unsplash).

La vergüenza es el factor principal de la masculinidad tóxica, descubrió la socióloga Brené Brown tras años de investigación: es la principal causa de masculinidad tóxica. Mientras que las mujeres experimentan vergüenza cuando no cumplen con expectativas poco realistas y conflictivas, los hombres se sienten avergonzados por mostrar signos de debilidad. La vulnerabilidad aún se percibe como una debilidad en lugar de una fortaleza, tener conversaciones difíciles que involucran esa vulnerabilidad es algo que los hombres a menudo tratan de evitar.

Han surgido grupos de hombres que se reúnen para tratar sus problemas emocionales y no apoyarse exclusivamente en sus parejas

Por ello están surgiendo "grupos de hombres". No tiene nada que ver con quedar a tomar una cerveza, sino reuniones psicológicas de camaraderia. Así lo cuenta Scott Shepherd, de Oregón, que descargó un 'manual de grupo para hombres' y decidió crear estas reuniones. "Normalmente, cuando los chicos se juntan, lo hacen para emborracharse, ver un partido, cosas así, no para hablar de sentimientos".

Las reuniones

"En estas reuniones hacemos meditación y también abordamos dificultades en nuestras relaciones. Algunos de nosotros rompemos de vez en cuando a llorar sin miedo a que nos califiquen de gais. Es un acto de coraje y confianza". El grupo no solo le ha enseñado formas alternativas de ser hombre, esposo y padre, sino que le ha dado a Scott un espacio para pensar qué tipo de hombre quiere ser. "Hasta que no hice este trabajo, no sabía que existía nada más que la definición predeterminada de masculinidad", explica.

No es el único, ya sea en grupos pequeños o grandes, los hombres que han decidido comenzar estas reuniones aseguran que han ayudado a mejorar las relaciones con sus parejas. "Es importante redefinir lo que es ser un buen hombre para la mujer o mujeres de tu vida", explica Shepherd. "Puedo empezar una relación sin ser egoísta emocionalmente". Charlas Ted como 'Qué he hecho tratando de ser muy hombre' de Justin Baldoni también le han ayudado. El concepto del rol de género se está deconstruyendo y volviendo a empezar. "Los hombres están reconociendo, por primera vez en la historia, que no son tan fuertes internamente como creen. Ya es un paso hacia delante", concluye.

"Tú me tienes a mí, Marge, pero ¿a quién tengo yo?",se pregunta el personaje de Homer Simpson en un capítulo en el que ha discutido con sus amigos. Una frase hilarante que, sin embargo, parece esconder una gran verdad: la masculinidad tóxica y la idea persistente de que los sentimientos son una cosa femenina ha dejado a una generación de hombres heterosexuales varados en una isla emocionalmente atrofiada, incapaz de forjar relaciones íntimas con otros hombres, y son las mujeres las que pagan el pato. Eso es lo que dice la periodista Melanie Hamlett en 'Harper's Bazaar'.

Relaciones de pareja Amor
El redactor recomienda