El antivacunas que denunció a su colegio por no dejarle ir a clase tiene varicela

Jerome Kunkel es un estudiante de 18 años de Kentucky, un estado del medio oeste de Estados Unidos, que el pasado mes de marzo demandó al Departamento de Salud de Northern Kentucky por prohibir que los estudiantes que no estuvieran vacunados asistieran al colegio de Nuestra Señora de la Asunción durante un brote de varicela.

Durante aquel episodio se contagiaron un total de 32 personas en el colegio, por lo que los responsables del centro escolar prohibieron que aquellos alumnos que no estuvieran al corriente de sus vacunas asistieran a clase. Jerome Kunkel entendió que esa decisión atacaba sus derechos como alumno y decidió demandar al departamento de educación del estado.

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EC/Agencias

Ahora hemos conocido que Jerome, que se negaba a ser vacunado por razones religiosas, ha contraído la varicela. El abogado de la familia, Christopher Wiest, ha confirmado a Science Alert que su cliente ha sido contagiado con el virus, pero no se arrepiente de su decisión: “Sus creencias religiosas están profundamente arraigadas. Desde su perspectiva, siempre reconocieron que corrían el riesgo de que sucediera y estaban de acuerdo con esa posibilidad".

Fiestas de la varicela

El abogado Wiest va más allá e invita a sus clientes a que contraigan la varicela, poniendo en peligro directamente a las familias: "Aproximadamente la mitad de mis clientes han rechazado vacunarse desde que presentamos el caso. Yo digo a las mamás y a los papás que el camino más rápido para resolver esto es hacer que los niños contraigan la varicela".

Yo digo a las mamás y a los papás que el camino más rápido para resolver esto es hacer que los niños contraigan la varicela

En ese mismo sentido actuó el propio gobernador de Kentucky, Matt Bevin, que llevó a sus nueve hijos a una fiesta de la varicela el pasado mes de marzo para que se contagiaran del virus. Entonces explicó que “los nueve se contagiaron y pasaron la enfermedad siendo niños. Estuvieron mal durante unos días y después todo salió bien”.

Los movimientos antivacunas están protagonizando un auge en los últimos tiempos tanto en Europa como en Estados Unidos y son muchos los que les acusan de provocar los últimos brotes masivos de enfermedades muy contagiosas como la varicela o el sarampión. Según la OMS, para que un país se considere protegido ante uno de estos virus deben estar vacunados más del 95 por ciento de las personas.